Hamas entregó la pasada medianoche a la Cruz Roja los cuerpos de cuatro rehenes, a la espera de la excarcelación de los 602 presos palestinos que Israel debía haber entregado el pasado sábado. Según la milicia islamista, ambos procesos serían simultáneos. Otras 23 personas –mujeres y menores– serían igualmente liberadas.
El acuerdo se producía después de que una delegación de Hamas liderada por Jalil al Haya se reuniera en El Cairo con funcionarios egipcios para discutir “la aplicación del alto el fuego, el intercambio de prisioneros y las perspectivas de la segunda fase de las negociaciones”.
A medianoche, un autobús con presos palestinos liberados por Israel llegó a la localidad cisjordana de Ramala, coincidiendo con la entrega en Gaza de cuatro cuerpos de rehenes israelíes.
El autobús de la Cruz Roja con los primeros presos palestinos liberados salió de la prisión israelí de Ofer y tardó una media hora en llegar al Palacio de Cultura de Ramala, donde decenas de personas esperaban a los presos, que salieron del vehículo vestidos con chándal verde y con pañuelos palestinos al cuello, según la retransmisión en directo de la cadena catarí Al Jazeera.

El autobús de la Cruz Roja en Ramala, anoche
Este será el último intercambio de la primera fase del acuerdo de alto el fuego entre Israel y Hamas. Según el trato negociado por Egipto y Qatar, con este nuevo canje Hamas habrá entregado hasta ahora 33 rehenes israelíes –incluidos ocho cadáveres– a cambio de unos 2.000 palestinos encarcelados por Israel. El acuerdo también estipula que Israel tendrá que retirar sus tropas de ciertas posiciones en Gaza, y permitir la entrada de ayuda básica en el territorio.
El Gobierno israelí paralizó la liberación de los 600 prisioneros palestinos prevista el pasado sábado a cambio de seis rehenes y cuatro cadáveres (tres, de la familia Bibas) como gesto de protesta por el trato que reciben los rehenes durante su liberación por parte de Hamas. La milicia islamista ha organizado grandes ceremonias públicas de carácter propagandístico durante las cuales los cautivos israelíes son exhibidos y obligados a saludar a los asistentes. Tanto Israel como la Cruz Roja y funcionarios de la ONU han señalado que estas ceremonias son humillantes para las personas liberadas.
El punto muerto sobre el intercambio había amenazado con hacer fracasar la primera fase del alto el fuego, que entró en vigor el pasado 19 de enero y que tenía que expirar este fin de semana.