
La inflación sigue creciendo poco a poco desde septiembre, empujada este mes de febrero por la subida de la electricidad. Se coloca en el 3%, como ya se vio en el dato avanzado por el Instituto Nacional de Estadística (INE), una décima más que en enero. Es la quinta subida consecutiva desde el mes de septiembre, que marcó mínimos con un 1,5% de tasa.
El incremento del precio del gas y el regreso del IVA de la luz a su tasa original desde el inicio de este año, una vez que se han ido eliminando las medidas urgentes por la crisis inflacionaria, propician esta pequeña subida. Aún y todo, aún están lejos de los valores de inicio del año pasado, que se colocaban alrededor del 7%.
La inflación subyacente, la que no tiene en cuenta ni energía ni alimentos frescos, siguió reduciéndose en febrero, dos décimas, y se situó en el 2,2%, la tasa más baja desde hace más de tres años, en concreto desde diciembre de 2021. Para María Jesús Fernández, economista jefe de Funcas, este descenso “lento” es más relevante porque “no da señales negativas a corto plazo”.
“Nuestra estimación es que va a seguir entorno al 2% y el 2,3% en lo que queda de año”, afirma Fernández. La principal causa de esta resistencia a seguir bajando es el sector servicios al consumo, especialmente por la subida de los salarios, que afectan a las tensiones inflacionarias.
En febrero destaca la bajada del precio del aceite de oliva, que se acentúa, acumulando una caída del 32,3% en el último año. La inflación sobre los precios de este producto lleva doce meses consecutivos reduciéndose y en concreto, la rebaja de precios empezó en el mes de noviembre. En valores mensuales (febrero sobre enero), se abarató un 8,7%, siendo también su mayor descenso mensual de la serie. Pese a todo, desde enero de 2021, este producto acumula un incremento en su precio del 97,1%.
El aumento de precios en todos los servicios relacionados con el turismo han pesado también en la inflación. El INE afirma que han tenido un impacto de 0,7% en la variación mensual de febrero respecto de enero.
Destaca la bajada del precio del aceite de oliva, que se acentúa, acumulando una caída del 32,3% en el último año
Por su parte, los carburantes contribuyeron a reducir ligeramente la inflación porque la subida que experimentaron en febrero fue inferior a la del mismo mes que el año pasado. Registra un incremento del 0,3%, un punto menos que el mes pasado y dos puntos porcentuales menos que en el mismo mes del 2024.
En concreto, el grupo de vivienda elevó dos puntos su tasa interanual en febrero, hasta el 9,8%, por la subida de los precios de la electricidad, en tanto que el grupo de transporte recortó un punto su tasa interanual, hasta el 0,3%, por los precios de los carburantes y lubricantes para vehículos personales.
Por su parte, el grupo de alimentos y bebidas no alcohólicas elevaron su tasa interanual cuatro décimas, hasta el 2,2%. Sin embargo, Fernández evalúa esta subida en términos de volatilidad de los mercados y no estima que se esté entrando de nuevo en un escenario de subida de precios de los alimentos.
El Ministerio de Economía, Comercio y Empresa ha subrayado en un comunicado que el repunte de la inflación en febrero se explica “fundamentalmente” por el aumento de la electricidad, al tiempo que ha resaltado la caída de la inflación subyacente (sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) a su “tasa más baja en más de tres años”.
El grupo de vivienda elevó dos puntos su tasa interanual en febrero, hasta el 9,8%
“En un contexto de incertidumbre internacional, España sigue manteniendo el mayor crecimiento entre las principales economías de la zona euro, que está siendo compatible con una moderación de los precios y las ganancias de poder adquisitivo de los ciudadanos”, ha resaltado Economía.
En enero, el factor determinante que provocó la subida de los precios fueron las gasolinas y la electricidad. En el caso de los carburantes, depende del precio del petróleo y ahora ha jugado a favor. Por lo que se refiere a la electricidad, interviene el IVA restablecido del 21%. Ya se contaba con el efecto inflacionista que provocaría el regreso del esta tasa a su nivel original, después de dar por superada la crisis inflacionista, y con su final, también el de las medidas de ayuda como un IVA más reducido.
Si se examina la tasa intermensual, los precios subieron un 0,4% entre febrero y enero de este año, lo que supone encadenar cinco meses con tasas mensuales positivas. La última caída se produjo en septiembre, con seis décimas menos que en agosto. Es verdad que aquel mes de septiembre fue especialmente positivo en cuestión de precios, con la tasa de inflación interanual situándose en un mínimo del 1,5% desde el cual ha ido subiendo progresivamente.
Las previsiones de Funcas para lo que resta de año es que la inflación siga bajando al un entorno del 2,5%, que será la media de cierre para el año. Todo siempre y cuando el precio del petróleo se mantenga en el entorno de los 70 dólares, la apreciación del euro sea estable y el precio del gas evolucione según están marcando los futuros, remarcó Fernández.