
La OCDE confirma que España es la locomotora de Europa y que la cura económica de Donald Trump causará una ralentización de la economía estadounidense, mientras que Europa, pese a la difícil coyuntura debería ir mejorando sus resultados. Son algunas de las conclusiones del últimos estudio de proyecciones económicas de esta organización que se han dado a conocer este lunes. Pero vamos por orden.
ESPAÑA
La economía española crecerá este año y el siguiente muy por encima de la media estimada para la eurozona, según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), que ha vuelto a revisar al alza su pronóstico de expansión del producto interior bruto (PIB) de España para 2025 al 2,6% desde el 2,3% y hasta el 2,1% desde el 2% el de 2026, frente a la rebaja generalizada de perspectivas ante el impacto negativo potencial de la incertidumbre vinculada al comercio y la geopolítica. Tres décimas más sólo para este año.
El economista jefe de la OCDE, Álvaro Pereira, ha dicho textualmente que España es “una luz”, en un contexto general de revisiones a la baja. Pereira mencionó el efecto positivo que está teniendo el sector turismo. Sin embargo, hay que recordar que sus cálculos son algo inferiores, de tan sólo una décima a lo que estima el Banco de España, que hace pocos días indicó que la economía española podría crecer este año (un 2,7%).
CRECIMIENTO GLOBAL E INFLACIÓN
Una de las novedades de este informe de previsiones es que por primera vez incorpora los aranceles de Donald Trump del 25% a México y Canadá y también calcula el efecto que tendría una guerra comercial con una recarga tarifaria del 10%. En este caso la entidad estima un aumento permanente de los aranceles bilaterales en 10 puntos porcentuales reduciría el crecimiento mundial en aproximadamente 0,3 puntos porcentuales para el segundo y tercer año del shock, mientras que la inflación mundial sería, en promedio, 0,4 puntos porcentuales mayor durante los primeros tres años.
EUROZONA
Y aquí va la sorpresa. Pese a los malos augurios, la eurozona, aún siendo más débil que el resto de bloques, mejorará su crecimiento, a diferencia de lo que se prevé ocurra en EE.UU., donde la tendencia apunta a la baja. Aunque los indicadores se revisaron a la baja (un 1% en 2025, tres décimas), es uno de las pocas economías que lo hará mejor en 2026 (un 1,2%). Si se quiere ver el vaso medio lleno, claro.
INFLACIÓN
Por usar una expresión un tanto enfática, la bestia no está domada. Todavía. La OCDE ha detectado que la desinflación en marcha se ha ralentizado. En más de la mitad de países se ha revisado al alza. Se percibe una cierta resistencia, especialmente en los servicios. «Una inflación superior a la prevista impulsaría una política monetaria más restrictiva y podría dar lugar a una revalorización disruptiva de los precios en los mercados financieros”, señala. Más tensión para las bolsas y más prudencia por parte del BCE o la Fed a la hora de recortar tipos. Con todo, Álvaro Pereira confía en que lo único que pasará es que se tardará más tiempo en alcanzar los objetivos deseados de inlación controlada.
Con una incógnita más: el gasto militar. «Un mayor gasto público en defensa también podría impulsar el crecimiento a corto plazo, pero potencialmente aumentaría las presiones fiscales a largo plazo”, alertan.
ESTADOS UNIDOS
El mensaje que trasciende en el estudio es claro: no sólo el mundo en su conjunto sino EE.UU. lo haría mejor si no hubiera puesto en marcha su política de subidas arancelarias. Vaya por delante que la OCDE no contempla que el Tío Sam caiga en recesión, sí que indica un frenazo: un 2,2% este año (dos décimas menos que las previsiones anteriores y menos que España) y un modesto 1,6% en 2026, con tijeretazo de cinco décimas menos. En el supuesto escenario de guerra comercial global con una subida de tarifas del 10%, la economía estadounidense sufriría un impacto significativo, con un crecimiento 0,7 puntos porcentuales inferior al que habría sido en condiciones normales para el tercer año. El coste directo para los hogares estadounidenses podría ascender a 1.600 dólares por persona.
ARGENTINA
¿Se puede hablar de un “efecto Milei?” Desde el punto de vista macroeconómico parece que sí. Si en 2024 la economía estaba en recesión con una contracción de 1,8%, este año repuntará un 5,7% y el siguiente un 4,8%. Unos números muy elevados, bien es cierto que la inflación se mantendrá por encima del 20%. La disciplina presupuestaria.
(habrá actualizaciones)