El Fondo Monetario Internacional (FMI) profundizó intercambios técnicos con los equipos del presidente electo de Argentina, Javier Milei, y espera «un plan de estabilización fuerte, creíble» y «con buen apoyo político», dijo Julie Kozack, portavoz del organismo multilateral. Kozack empaquetó las múltiples preguntas sobre la suerte del programa económico de Argentina en un par de declaraciones en las que destacó el trabajo y los contactos con Milei, el jefe de Gabinete Nicolás Posse y el ministro de Economía, Luis Caputo. Evitó responder sobre «especulaciones», como el impacto de la esperada devaluación del tipo de cambio. «En este momento, estamos concentrados en tener un plan de estabilización fuerte, creíble y con apoyo para atender los desafíos del país», dijo Kozack. Ese programa, enfatizó, debe tener «buen apoyo político», en un escenario de fragmentación en el Congreso. Kozack recordó que la directora gerente del Fondo, Kristalina Georgieva, mantuvo una videoconferencia con Milei «constructiva», en la que «recalcó su compromiso para fortalecer las finanzas públicas, reducir la inflación y crear una economía más próspera liderada por el sector privado». En esa conversación «hablaron sobre los desafíos importantes y la necesidad de tomar acciones decisivas». La funcionaria del Fondo no abundó sobre la posibilidad de que el organismo preste más dinero a Argentina. Georgieva había dicho que el país tiene a disposición dinero del Fondo de Resiliencia, creado para atender cuestiones vinculadas a la transición energética y otras. No respondió si se trató de una sugerencia de la directora del FMI o si, efectivamente, avanzaron sobre este financiamiento. Semanas atrás, Posse y Caputo viajaron a Washington y se entrevistaron con funcionarios del Fondo. Luego de esa reunión, dijo Kozack, continuaron los intercambios a nivel técnico.»A nivel técnico han continuado esas conversaciones positivas», agregó.