

El Govern movilizará 1.500 millones de euros para un “plan de defensa” con el que busca dar respuesta a la política arancelaria emprendida por Estados Unidos y cuyos recursos se centrarán en ayudas, préstamos y créditos para “proteger y relanzar” a las empresas catalanas. El president de la Generalitat, Salvador Illa, así lo ha trasladado este lunes al Consell del Diàleg Social y también al Consell General de Cambres.
El plan lleva por título ‘Responem: Pla de defensa de la Catalunya de tothom’, en el que han trabajado cuatro departamentos del Executiu. Según datos del Govern, el arancel del 20% afectaría al total de los 4.351 millones de euros de las exportaciones catalanas a Estados Unidos y a las 3.161 empresas que exportan al país norteamericano. Los sectores más afectados son el químico, el farmacéutico, el de la maquinaria, la agroalimentación y productos metálicos.
La concreción del plan
En materia de ayudas y subvenciones, habrá 300 millones de euros para activar estas líneas que partirán de los presupuestos de la Generalitat. Por un lado, habrá ayudas a fondo perdido, especialmente orientados al sector agroalimentario; también ayudas para la promoción internacional y otra línea para la multilocalización empresarial con la finalidad de “ampliar la presencia de empresas catalanas en el exterior”.
La mayor partida será la relativa a préstamos y créditos. Se desembolsarán 900 millones para que el Institut Català de Finances (ICF) lleve a cabo avales, créditos circulantes, créditos de inversión y bonificación del tipo de interés de los créditos hasta el 1,5%. Por otro lado, se destinan 150 millones a fondos de inversión y capitalización vehiculados a través del ICF y Avançsa.
Otros ejes del plan tienen que ver con el asesoramiento y campañas comunicativas y de promoción de las empresas catalanas. La cuantía para ofrecer un servicio de asesoramiento que contribuya a “impulsar la internacionalización y diversificación de los mercados” de las empresas será de 130 millones de euros. Esto se concreta en planes específicos “para la adaptación a los nuevos Estados Unidos”, a la “reorientación” de la red de oficinas en el exterior y “herramientas para superar barreras comerciales”, además de programas publicoprivados que ayuden a las empresas a iniciarse en las exportaciones.
Los 20 millones restantes del plan son para la rama comunicativa. Con este dinero se prevé desplegar campañas que “potencien los productos catalanes en mercados estratégicos”.
El president de la Generalitat, Salvador Illa, ha reunido este lunes al Consell del Diàleg Social para dar traslado de este plan. Además de Foment del Treball, Pimec, CCOO y UGT, han participado en la reunión la consellera d’Economia, Alícia Romero, y el conseller de Empresa i Treball, Miquel Sàmper.
A las 11 se reúnen con el Consell General de les Cambres Oficials de Comerç, Indústria i Navegació de Catalunya. Tras estos encuentros, Illa realizará una declaración institucional. Por la tarde, los consellers Romero, Sàmper y el de Presidència, Albert Dalmau, se reunirán con los grupos parlamentarios para informarles de estas acciones.