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En el ciclo actual, Ethereum enfrentó la competencia de varias otras redes de criptomonedas.
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La proliferación de L2 en Ethereum hizo que decaiga el interés por comprar ETH.
“En mi opinión, es un gran momento para comprar ether (ETH). Puedes agradecerme después”.
Esa fue la reflexión que Eric Trump, hijo del presidente de Estados Unidos, compartió el pasado 3 de febrero a través de su cuenta personal en X.
Su opinión no pasó desapercibida, debido a sus vínculos directos con la administración y su rol activo como directivo de World Liberty Financial, el proyecto de finanzas descentralizadas (DeFi) vinculado a la familia Trump.
Por aquel entonces, la cotización de la moneda nativa de la red Ethereum superaba el nivel de 2.900 dólares.
Sin embargo, dos meses después de esa publicación, ETH se está «desangrando» y su precio se desplomó cerca de 50%.
Al momento de la publicación de esta nota, el precio de ether es de 1.520 dólares, un 69% por debajo de su máximo histórico (ATH) de 4.890 dólares.
Al margen de las palabras de Eric Trump, el mercado podría estar dando señales: ¿será el fin del tiempo de gloria de ETH?
Para entender lo que está ocurriendo con Ethereum, no hay que omitir que el mercado de las criptomonedas en general está en rojo como consecuencia de la guerra comercial que desató el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Como ha reportado CriptoNoticias, el pasado 2 de abril, en el “Día de la Liberación”, el mandatario anunció aranceles recíprocos para varios países, entre los que se destacan China, Canadá, toda Latinoamérica y naciones de la Unión Europea (UE).
Estas políticas han generado un escenario de turbulencia económica, en el cual los inversionistas se alejan de activos considerados de riesgo como bitcoin (BTC) y las criptomonedas, y buscan refugio en otros instrumentos financieros, como los bonos del Tesoro.
Ahora bien, si a este contexto adverso para los activos digitales, se le suma que el ecosistema Ethereum no atraviesa su mejor momento, la situación para ETH se vuelve aún más delicada y compleja.
Desde la activación de Dencun, el ecosistema creado por Vitalik Buterin enfrenta múltiples desafíos.
Tal como ha reportado CriptoNoticias, Dencun es una actualización que reorganizó la forma en que se gestionan los datos en la red principal de Ethereum, permitiendo reducir los costos operativos de las redes de segunda capa (L2), como Base, Celo, Optimism y Arbitrum, al facilitar la publicación de lotes de transacciones.
La proliferación de las redes L2 ha fragmentado la actividad dentro del ecosistema Ethereum, lo que ha repercutido negativamente en la apreciación del precio de ETH.
Esto se debe a que muchas transacciones ahora se realizan fuera de la cadena principal, lo que reduce el uso de ETH para comisiones. Como resultado, disminuye su demanda y esto impacta directamente en su cotización.
Según datos de Token Terminal, los ingresos de la L1 se desplomaron un 99% en los últimos seis meses.

Otra señal del debilitamiento de ETH es que su capitalización de mercado ya no representa la mayor parte del valor en la red Ethereum.
Hoy, los tokens ERC-20 superan en valor a ether, lo que evidencia que las aplicaciones construidas sobre Ethereum están capturando más interés y capital que el propio activo nativo.
Según datos de la plataforma Ultra Sound, el ecosistema tiene un valor de 450.000 millones de dólares. De ese total, 189.450 millones de dólares corresponden a ETH, 242.930 millones de dólares a los tokens ERC-20 y 12.660 millones de dólares a tokens no fungibles (NFT).
En este ciclo, Solana también se consolidó como un competidor relevante para Ethereum, destacándose por ofrecer mayor velocidad, menores costos de transacción y una actividad más concentrada dentro de su propio ecosistema.
Esta tendencia bajista se profundiza aún más si se compara el precio de ETH medido en bitcoin.
Al momento de la publicación de esta nota, la cotización de ETH medida en la moneda creada por Satoshi Nakamoto cayó a 0,019 BTC, su nivel más bajo desde diciembre de 2020.

La evolución de precios en los últimos años muestra una clara diferencia en el rendimiento de ambos activos. Desde comienzos de 2021, BTC subió de 13.000 a 77.000 dólares, lo que representa una suba del 492%.
En contraste, ETH pasó de 730 a 1.500 dólares, con un incremento aproximado del 105%.
Esta brecha en el desempeño también se refleja en los resultados recientes. Según datos de Coinglass, ETH ha tenido un primer trimestre negativo en tres oportunidades: en 2018 (-46,61%), en 2022 (-10,75%) y en 2025 (-45,41%).

Así las cosas, los desafíos que enfrenta actualmente Ethereum demuestran que la reflexión de Eric Trump no llegó en el mejor momento, o que, al menos, sus palabras no fueron del todo acertadas dadas las circunstancias.