La dificultad de la minería de Bitcoin (BTC) podría registrar una disminución cercana al 6% en los próximos días, lo que marcaría el mayor ajuste bajista desde diciembre de 2022, de acuerdo con estimaciones de The Miner Mag.
Este cambio, previsto para el 4 de mayo según datos de mempool.space, llega en un contexto de condiciones adversas para los mineros, quienes han enfrentado márgenes reducidos debido a un hashrate de Bitcoin que a comienzos de abril tocó por primera vez la zona de los zettahashes por segundo (ZH/s) y un hashprice en niveles bajos.
El pasado 5 de abril, luego de que la red creada por Nakamoto registrara ese pico en su poder de procesamiento, la dificultad de minar Bitcoin trepó al alza un 7%, marcando un máximo histórico de 121 billones. En su último ajuste, el 19 de ese mismo mes, esa medición subió a los 123 billones, una cifra que se mantendrá hasta el 4 de mayo.

¿Qué es la dificultad de la minería y por qué caería?
La dificultad de la minería es un parámetro que ajusta los cálculos necesarios para validar transacciones en la red Bitcoin y obtener la recompensa por bloque.
Ese mecanismo, que se recalibra aproximadamente cada dos semanas, busca mantener un tiempo promedio de 10 minutos entre bloques, adaptándose a los cambios en el poder de cómputo total de la red, conocido como hashrate. Cuando se dice que la dificultad minera «cae», significa que será más fácil para los mineros encontrar un nuevo bloque.
Conforme a The Miner Mag, la disminución proyectada en la dificultad responde a un retroceso en el hashrate, impulsado por las duras condiciones que han enfrentado los mineros en las últimas semanas. Los equipos menos eficientes han sido desconectados, ya que los bajos ingresos no justificaban los costos operativos.
El análisis de The Miner Mag indica que esa circunstancia, «combinadas con una liquidación generalizada en el mercado y tarifas de transacción en mínimos, ha presionado los márgenes de los mineros, forzando a muchos a suspender operaciones o buscar estrategias para optimizar costos».
Además, otro factor que complicó la actividad minera fue la caída del hashprice, la métrica que mide los ingresos esperados por unidad de hash aportada a la red. CriptoNoticias explicó que este indicador, clave para los mineros, recientemente se desplomó a la zona de los 0,044 dólares por terahash por segundo al día, viniendo desde los 0,060 dólares/TH/día a mediados de enero de 2025.
Hashrate en retroceso tras un máximo histórico
El hashrate de Bitcoin, que en abril de 2025 alcanzó por primera vez el hito de 1 ZH/s, ha mostrado una caída significativa en la actualidad según mempool.space. Al momento de redactar este artículo, esa métrica se sitúa en 792 exahashes por segundo (EH/s), lo que representa una disminución del 13% respecto a los 911 EH/s registrados en la jornada anterior.

Sin embargo, otras fuentes ofrecen estimaciones ligeramente diferentes: Braiins reporta un hashrate de 840 EH/s, mientras que The Miner Mag lo ubica en 820 EH/s, reflejando la volatilidad de la red.
Un alivio impulsado por el precio de bitcoin
En medio de este panorama, el reciente repunte del precio de bitcoin, que superó los 96.000 dólares ayer 30 de abril por primera vez desde el 24 de febrero pasado, ofrece un respiro a los mineros.

Durante varias semanas, la cotización de bitcoin osciló entre 74.000 y 89.000 dólares, un rango cercano al costo promedio de producción por moneda, estimado en 76.000 dólares por la firma de análisis Capriole. Este escenario mantuvo a los mineros operando con márgenes ajustados.
El aumento en el precio de bitcoin ha impulsado una recuperación parcial del hashprice, que alcanzó actualmente los 0,050 dólares por terahash por segundo al día según informa Braiins.
La combinación de un ajuste a la baja en la dificultad (si se concreta) y una mejora en los ingresos por unidad de hash podría estabilizar temporalmente las operaciones de los mineros, aunque la volatilidad del mercado y los costos energéticos seguirán siendo desafíos clave para la industria en el corto plazo.