
Aunque el Sabadell trató ayer de desligar la venta de su filial británica TSB de la opa hostil del BBVA, el consejero delegado del banco catalán, César González-Bueno, reconoció que con la desinversión se encarece y dificulta la operación. Y puso como ejemplo lo sucedido ayer en bolsa cuando se desacopló la evolución del Sabadell y el BBVA al subir un 5,22% el primero frente a un 1,44% el segundo.
El primer efecto es que se ayer la prima era negativa en un -10. Eso significa que si la opa hubiera sido ayer, los accionistas que hubieran aceptado la oferta del BBVA habrían perdido casi un 10%. Fuentes del mercado señalaron que era normal que el Sabadell subiera en bolsa porque el precio pagado por el Santander (3.100 millones de euros) es superior a la media que esperaban los analistas.
“Esta operación hace que el valor del Sabadell aumente. Si antes considerábamos que el valor de la opa era insuficiente, ahora un poco más”, dijo González-Bueno en una rueda de prensa desde la sede operativa del banco en Sant Cugat del Vallès acompañado del director financiero, Sergio Palevecino.
Sobre el precio pagado por el Santander, el consejero delegado del Banc Sabadell negó que haya estado influenciado porque el Santander quisiera perjudicar a su principal rival en España, el BBVA. En el Santander “son capaces de extraer más valor al TSB que nosotros”, reflexionó. El Santander detalló el martes que espera 400 millones de sinergias con la compra.
El Sabadell ve irrelevante quién comenzó las negociaciones de venta
Con el dinero obtenido por la venta del TSB, el consejo del Sabadell propondrá a los accionistas que aprueben -además de la operación- la distribución de un dividendo extraordinario de 2.500 millones. Sobre la posibilidad de que en los próximos meses un consejo de administración nuevo nombrado por el BBVA (si triunfa la opa) pudiera revertir la decisión de distribuir dividendos extraordinarios a cuenta de la venta, González-Bueno aseguró que no es posible. “El nuevo consejo puede revertir muchas decisiones pero lo que no puede son los derechos adquiridos por los accionistas. No puede pasar”, detalló.
En cuanto a la eventualidad de que, con la venta del TSB el Sabadell debilite su situación a futuro, ya que podrá ser comprado más fácilmente por un tercero al ser una entidad más pequeña, González-Bueno respondió que no son posibles nuevas opas hostiles en España: “No imagino al BBVA intentándolo una tercera vez, no espero al Santander y no espero a CaixaBank”, zanjó.
El consejero delegado precisó, a preguntas de los periodistas, que los dividendos se repartirán el año que vienen a los que sean accionistas en ese momento. Por lo tanto, como ya advirtió en vídeo el presidente Josep Oliu la víspera, los accionistas que opten por vender las acciones al BBVA se quedarán sin el dividendo de 50 céntimos por título. En total, la remuneración comprometida por el Sabadell a sus accionistas equivale a alrededor del 28% del valor los títulos.
Ante las dudas expresadas sobre el deber de pasividad que obliga al consejo a no llevar a cabo decisiones que puedan perjudicar a la opa, el directivo insistió en que la decisión la tomará la junta. “Si la junta lo aprueba es irreversible”, detalló. En su opinión es irrelevante determinar quién inició las conversaciones de venta entre el Sabadell y el Santander.
“Esta operación hace que el valor del Sabadell aumente”, afirmó González-Bueno
Mientras, el BBVA prepara el documento final de la opa para remitirlo a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). A partir de ese momento, la CNMV tardará unas tres semanas en aprobarlo y dar comienzo al periodo de aceptación de la opa. Ese proceso puede comenzar pocos días antes de que se celebre la junta extraordinaria del Sabadell el día 6 de agosto. Como detalló la semana pasada la CNMV, el BBVA puede presentar un suplemento de la opa para incluir cualquier impacto por la venta de TSB. Lo que no puede hacer es rebajar la oferta por el dividendo que se va a distribuir. Sólo se reduce automáticamente cuando se reparte de manera real, no cuando se anuncia.
Ayer desde Sevilla, el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, pidió “respeto y prudencia” para la opa lanzada por BBVA en un momento en que los actores privados “están por decidirse”. Preguntado -en un encuentro con medios durante la IV Conferencia de la ONU sobre Financiación al Desarrollo- sobre la decisión de Banco Sabadell de vender su filial británica TBS a Santander. insistió en que la participación del Gobierno en la opa terminó con su autorización.