
El 2024 fue de contrastes en lo económico para los fabricantes de coches en España. La facturación y la producción cayeron por la menor demanda en Europa, pero al mismo tiempo las empresas invirtieron más y consiguieron duplicar el beneficio, según el informe anual del sector presentado este jueves por la patronal Anfac.
Por capítulos, la facturación agregada se redujo un 1,7%, a 76.855 millones de euros, en un entorno de menor demanda en Europa, sobre todo de Alemania y Francia. La producción también se resintió, con un retroceso del 3%, a 2,37 millones de unidades, por la atonía en el continente y la adaptación de líneas para la fabricación de nuevos modelos. En este último punto se enmarca un incremento de la inversión de al menos el 2%, a 2.434 millones.
En términos de resultado neto, se salta de 1.039 millones de euros a los 2.018 millones, casi el doble y un máximo en la serie. Hay un par de factores que explican el tirón. Primero está la competitividad propia de España, que permite producir con menores costes que en otros países europeos y que en parte explica por qué la asignación de inversión aumenta. Aunque se produzca menos, se hace de forma más eficiente en términos de costes, por lo que el beneficio puede incrementarse. Luego, si bien las ventas no han crecido tanto, puede darse que las unidades vendidas tengan mayores márgenes. En último lugar, en la cifra se recogen en su mayoría datos de filiales de grupos extranjeros, y que cada uno puede cambiar cómo consolida sus cifras españolas. Por ello, José López Tafall, director general de Anfac, llama a la prudencia con este dato de ganancias, tanto por la forma de medir de las filiales, los muchos profit warnings de las matrices y la “incertidumbre regulatoria y por la guerra comercial”.
Desde Anfac destacan la captación de inversión de los fabricantes, con más asignación de modelos o la reconversión de líneas para fabricar eléctricos. “El compromiso desde el punto de vista inversor del sector sigue aumentando”, ha dicho López Tafall. El año pasado se recuperó además la planta de Nissan en la Zona Franca, en la que empezó a fabricar Ebro. “Es importante recuperar los centros de producción y no perder ninguno”, ha planteado en este frente. En total se fabrican unos 50 modelos en España, de los que 30 son híbridos enchufables o eléctricos.
En términos de empleo, en el sector trabajan 57.189 personas, unas 1.300 menos que el año pasado por los ajustes en la producción. “Aún vivimos en un mercado que se está consolidando”, ha advertido.
El director de Anfac ha planteado que es necesario incrementar los fondos para los planes de apoyo en la compra como el Moves, tras agotarse ya en Madrid, por ejemplo, “porque si no tendrá un recorrido corto”. En términos más amplios, pide “seguir impulsando la electrificación tanto en demanda como fabricación”, con la necesidad de “acelerar el ritmo de mercado”. En el 2024 el mercado electrificado se estancó sobre el 11% del total, “un año perdido”, pero en la primera mitad del año salta al 17%, aún debajo del 24% de media de la Unión Europea.