Los visados para construir vivienda nueva en la provincia de Barcelona han caído un 34,1% en el primer semestre del año, indican los datos presentados este jueves por el Col·legi d’Arquitectes de Catalunya. La fuerte bajada coincide con un momento de presión en el mercado inmobiliario, con compraventas y precios al alza, y de crecientes dificultades para acceder a un piso, sobre todo para colectivos jóvenes y rentas bajas.
Desde el Col·legi han mostrado su preocupación por lo que parece un freno en el sector, aunque han pedido prudencia a la hora de sacar conclusiones. “Hay que esperar a la evolución de todo el año, creemos que en los próximos meses la situación puede mejorar”, ha indicado el decano de la institución, Guillem Costa i Calsamiglia.
Las cifras de visados que dan los arquitectos se corresponden, en su gran mayoría, con proyectos privados, ya que la vivienda de promoción pública no está sujeta a la obligatoriedad del visado. En los primeros seis meses del año, se han firmado 8.107 viviendas de nueva creación visadas, un retroceso del 22% respecto al mismo periodo del año anterior.
Esta bajada semestral se explica en parte, según el Col·legi, porque en el 2024 se visaron grandes promociones de vivienda de protección oficial promovidas por la administración pública. “Aunque se está pendiente de poder visar promociones de esta tipología en el segundo semestre del 2025, el ritmo de creación de nuevas viviendas continúa lejos de los objetivos del Plan Territorial Sectorial d’Habitatge”, han explicado los arquitectos.
En cuanto al plan del Govern para construir 50.000 viviendas públicas antes del 2030, el análisis destaca que el ritmo de viviendas de protección oficial ya visadas “contrasta” con los objetivos de la Generalitat. Sólo el 18% de todos los pisos firmados en el primer trimestre son de protección oficial, la mayoría de los cuales (1.107) se encuentran en la provincia de Barcelona. Pese a ello, Guillem Costa ha precisado que esperan que la construcción de vivienda social asociada a este plan coja velocidad en los próximos meses. “Ya hay más de 600 solares que se están movilizando para levantar unas 22.000 viviendas, prevemos que el volumen de trabajo crezca”, ha subrayado.
Sólo 32 viviendas por la reserva del 30% de pisos sociales en la ciudad de Barcelona
La capital catalana y toda su área metropolitana concentran la mayor caída de visados de vivienda nueva, cuando la mayoría de la demanda para adquirir un piso se encuentra precisamente aquí. En Barcelona ciudad se firmaron 833 viviendas, un 34% menos que en el primer semestre del 2024, y de éstas, solo 32 corresponden a la obligación del 30% de pisos sociales. “Esperamos que haya un acuerdo para modificar esta norma”, ha afirmado el decano, ya que está paralizando la promoción de vivienda en la ciudad.
La proyección de pisos también cae en las provincias de Tarragona (-17,3% de visados) y de Lleida (-1,25%), mientras que aumenta en las comarcas de la Catalunya central (+23,1%) y e Girona (21,5%). En esta última se han visado 1.507 pisos de obra nueva, el mejor dato de los últimos 10 años.
Los arquitectos han pedido en este sentido agilidad para facilitar la creación de obra nueva en un momento de alta demanda y de crecimiento demográfico por la llegada de personas migrantes.
