“Ayudamos a las personas a pagar lo mínimo en electricidad de forma sostenida en el tiempo”, asegura Marc Laporte, uno de los socios de la startup Llama Energy. De hecho, antes de ser socio de la empresa, Laporte fue uno de los primeros clientes de esta compañía que utiliza la inteligencia artificial para analizar el recibo de la electricidad y contratar directamente la comercializadora eléctrica más económica. “¡Me gustaba mucho el producto y la idea!”, reconoce el emprendedor.
Laporte conoció al fundador e ideólogo de Llama Energy, Alexander Pavlov, a través de la red social especializada en contactos profesionales Linkedin. “Fue a través de un conocido. Alex estaba buscando a alguien con quien emprender en Barcelona y estaba investigando el mercado. Tuvimos una buena conexión desde el inicio y fuimos quedando para vernos de vez en cuando”, recuerda Laporte. “Como Alex no habla castellano –continúa el ahora empresario– me pidió que le ayudara a hacer de comercial y, al cabo de un mes, ya me incorporé como socio”.

Los cofundadores de Llama Energy, Marc Laporte y Alexander Pavlov, se conocieron en Linkedin
Llama Energy nació en el año 2024. A diferencia de los comparadores comerciales o de las asesorías energéticas convencionales, la empresa emergente propone “tantos cambios de compañía como haga falta”, en palabras de Laporte. Es decir, una vez analizada la factura, la plataforma continúa monitorizando los recibos y los precios de mercado para proponer nuevos cambios en el futuro. Otra gran diferencia es que el servicio es sufragado por el consumidor final, que paga una cuota anual de 25 euros. “No cobramos de las compañías eléctricas, como suele ser habitual; de este modo nos mantenemos independientes”, afirma el cofundador.
La plataforma se basa en una tecnología propia y funciona por WhatsApp, aunque la idea es que más adelante sea omnicanal, según Laporte. La empresa se dirige “básicamente a particulares, porque son los típicos clientes que no cambian nunca de compañía”, indica Laporte. “Nuestro reto es que la gente pierda el miedo a cambiar de comercializadora eléctrica”, añade el emprendedor. En la actualidad, Llama Energy cuenta con unos 500 clientes y los fundadores prevén llegar a los 5.000 a finales de este año. “¡Tenemos previsto un gran crecimiento!”, avanza el cofundador.
Con sede en Barcelona y un equipo de cuatro personas contando a los dos socios, la empresa emergente opera en toda España. Hasta la fecha, la compañía se ha financiado gracias a una ronda de inversión de 400.000 euros cerrada en el 2024.