La Corte Penal Internacional ha acusado formalmente al expresidente filipino, Rodrigo Duterte, por crímenes de lesa humanidad. Según ha revelado el tribunal, Duterte estaría implicado en la muerte de al menos 76 personas durante su carrera política, que abarca su etapa como alcalde de la ciudad de Dávao, en el sur del país insular, así como el periodo en el que ejerció como presidente de Filipinas, entre el 2016 y el 2022.
Entre otras cosas, se alega que Duterte ordenó y autorizó “actos violentos, incluidos asesinatos, contra presuntos criminales, incluidos presuntos traficantes y consumidores de drogas”.
Los cargos contra el expresidente Rodrigo Duterte
El primer cargo cita a 19 víctimas asesinadas mientras Duterte era alcalde de la ciudad de Davao entre 2013 y aproximadamente 2016. El segundo involucra a 14 personas que murieron en asesinatos selectivos entre 2016 y 2017, cuando Duterte era presidente. El tercero menciona los asesinatos de 43 personas durante las llamadas “operaciones de limpieza” entre 2016 y 2018.
Tanto Duterte como su defensa no han hecho pública ninguna reacción al respecto. Durante su etapa presidencial, el líder filipino negó haber autorizado ejecuciones extrajudiciales, aunque amenazaba abiertamente con la muerte a los sospechosos de drogas y alentaba a la policía a abrir fuego si los sospechosos ofrecían resistencia violenta durante arrestos y ponían en peligro a los agentes.

Duterte fue arrestado en marzo por las autoridades filipinas mediante una orden emitida por la Corte. Actualmente, se encuentra detenido en una instalación del mismo tribunal de los Países Bajos. Sus seguidores criticaron a la administración del presidente Ferdinand Marcos Jr., el mayor rival político del expresidente, por arrestar y entregar al exmandatario al tribunal. Pese a que la audiencia judicial estaba prevista para el martes, se pospuso para dar tiempo a los jueces para evaluar los argumentos de la defensa, quienes alegan que Duterte no está en condiciones de ser juzgado.