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El proyecto busca crear una moneda digital regulada que compita con USDT y USDC.
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Los bancos priorizan el cumplimiento y la transparencia, alineados con el Genius Act y MiCA
Diez de las principales entidades financieras del mundo, entre ellas Goldman Sachs, Citigroup, Bank of America, Deutsche Bank, UBS, BNP Paribas, MUFG, TD Bank, Barclays y Santander, han conformado un consorcio para evaluar el lanzamiento de una stablecoin respaldada por monedas del G7, con el objetivo de integrar los beneficios del dinero digital a los estándares regulatorios del sistema bancario tradicional.
Según informó Reuters, el grupo busca determinar “si una nueva oferta conjunta del sector podría aportar los beneficios de los activos digitales, garantizando al mismo tiempo el pleno cumplimiento normativo y las mejores prácticas de gestión de riesgos”. El proyecto se encuentra en una fase preliminar y no hay aún una decisión sobre su implementación final.
Lo que se conoce del proyecto
La stablecoin estaría respaldada en una proporción 1:1 con monedas como el dólar estadounidense, el euro o la libra esterlina, y se emitiría sobre redes públicas. El objetivo, explican los bancos, es crear una forma de dinero digital que mantenga la confianza y estabilidad de las divisas tradicionales, pero que al mismo tiempo permita pagos más rápidos y eficientes a nivel global.
El movimiento refleja la creciente atención de las instituciones financieras a un mercado dominado hasta ahora por empresas de criptomonedas como Tether (USDT) y Circle (USDC), que controlan más del 70% del volumen de stablecoins en circulación.
El consorcio enfatizó que su prioridad será operar bajo un marco regulatorio sólido, en sintonía con normativas como la ley Genius en Estados Unidos y MiCA en la Unión Europea, que establecen reglas estrictas para emisores de stablecoins.
“Queremos que la innovación avance dentro de los límites de la seguridad y la supervisión financiera”, dijo el comunicado citado por Reuters. De concretarse, esta iniciativa podría marcar un punto de inflexión en la relación entre el sistema bancario y las finanzas digitales.