El gran pacificador también es el gran acosador mundial.
Donald Trump alardea de que en escasos nueve meses al frente del gobierno de Estados Unidos ha puesto fin a ocho guerras, palmo más, palmo menos. Pero a su vez, mientras aspira a llevarse el Nobel de la Paz en próximas ediciones, no cesa en su empeño de coaccionar y buscar nuevos conflictos.
Amenazó con invadir Canadá para convertirlo en el estado 51; trató de ahogar económicamente a Brasil con aranceles; bombardea narcolanchas en la costa de Venezuela y promete operaciones terrestres contra el régimen de Nicolás Maduro, y este domingo puso en el punto de mira al presidente de Colombia, el progresista Gustavo Petro, al que acusó de ser “líder del narcotráfico”, por lo que ha anunciado el fin de las ayudas, subsidios en su léxico, a la nación sudamericana. Incluso dejó caer que este país podría ser el objetivo de ataques militares.
Nuevo ataque en el Caribe
Hegseth anuncia el bombardeo de una barca, con tres muertos, vinculada a la guerrilla colombiana
Desde su red social, justo antes de irse a jugar el golf durante el fin de semana en Florida (para evitar el ruido de los cientos de miles de manifestantes del sábado en contra de su “reinado” y para mostrar que no le inquieta el cierre financiero de la administración), el mandatario conservador arremetió contra Petro. “Es un líder narcotraficante que fomenta la producción masiva de drogas en campos grandes y pequeños en toda Colombia”, escribió. (Por error se refirió a “Columbia”).
“Esto se ha convertido de lejos en el mayor negocio en Colombia y Petro no hace nada por frenarlo”, sostuvo. Y actúa así “a pesar de los pagos a gran escala y subsidios de EE.UU. que no son más que una estafa a largo plazo para Estados Unidos”, insistió el presidente.
“A partir de hoy, estos pagos o cualquier otra forma de pagos o subsidios ya no se hará a Colombia”, proclamó en su mensaje. “El propósito de esta producción de drogas es la venta masiva de cantidades de este producto en Estados Unidos, causando muerte, destrucción y estragos, alertó. Y remató la faena: “Petro, un líder poco valorado e impopular, con lengua larga contra EE.UU., será mejor que acabes con esos campos o Estados Unidos los cerrará, y no se hará de forma bonita”.

El presidente de Colombia replicó que Trump vive “engañado” al considerarlo un narcotraficante, ya que a lo largo de su trayectoria lo que ha hecho ha sido denunciar a las mafias de la droga. “Yo fui el que descubrí las relaciones del narcotráfico con el poder político de Colombia”, mantuvo Petro.
Al presidente sudamericano ya le retiraron el visado en septiembre, cuando viajó a Nueva York para asistir a la asamblea general de la ONU. La causa: animar a los militares de EE.UU. a no disparar contra sus compatriotas en el Caribe.
Pero la ira de Trump estalló el domingo después de que un día antes el colombiano le acusara de cometer crímenes al hundir lanchas en el Caribe y matar, a al menos, un pescador colombiano. Al rato del mensaje de Trump, el secretario de Guerra, Pete Hegseth, difundió que EE.UU. atacó y hundió el viernes un bote afiliado a un grupo guerrillero colombiano. Hubo tres muertos.