El Banco Nacional de la República Checa (CNB) dio un paso inédito al adquirir activos digitales por primera vez, en una operación valorada en un millón de dólares. Según la entidad, el objetivo del proyecto es obtener experiencia práctica con tecnologías basadas en criptomonedas y evaluar su posible papel dentro del sistema financiero del país.
El banco explicó que la inversión se realizó fuera de sus reservas internacionales y que no busca obtener rentabilidad, sino probar los procesos técnicos y regulatorios asociados al manejo de criptoactivos. El portafolio de prueba incluye bitcoin, una stablecoin respaldada en dólares y un depósito tokenizado, lo que permitirá comparar el comportamiento y las características de distintos tipos de activos.
Según el gobernador de la entidad, Aleš Michl, la iniciativa comenzó a principios de 2025 como parte de una estrategia para estudiar bitcoin desde la perspectiva de un banco central.
Con el tiempo, el proyecto se amplió para abarcar otras formas de dinero digital, con el objetivo de analizar el futuro de los pagos y la tokenización de activos financieros. «Queremos estar preparados para los cambios que traerá la digitalización de la economía», afirmó Michl.
Además, el funcionario aclaró que la corona checa seguirá siendo la única moneda de curso legal en el país y que el banco continuará enfocado en mantener la estabilidad de precios. Sin embargo, destacó que en los próximos años surgirán nuevas formas de invertir y pagar, e incluso no descarta que los ciudadanos puedan adquirir bonos checos tokenizados, con la misma facilidad con la que hoy hacen una compra cotidiana.
El CNB precisó que el tamaño limitado de este portafolio de bitcoin y criptomonedas evita cualquier impacto en su política monetaria o en su capacidad de intervenir en el mercado cambiario.
La iniciativa fue aprobada por la Junta del Banco el 30 de octubre de 2025, tras analizar el crecimiento del interés institucional por los activos digitales. Aunque el CNB no planea incorporarlos a sus reservas internacionales en el corto plazo, publicará los resultados de esta experiencia en los próximos dos o tres años. Se trata de un proyecto que busca fortalecer sus capacidades técnicas y anticiparse a la transformación digital del sistema financiero.
El reciente paso del Banco Central de Chequia se enmarca en un escenario de apertura regulatoria dentro del país. Vale destacar que, en febrero, el presidente Petr Pavel promulgó una ley que establece un marco claro para los criptoactivos, alineado con la normativa MiCA y con reglas tributarias simplificadas. Esto fue reportado por CriptoNoticias.
