Cientos de miles de palestinos se pusieron a las 07.00 horas de la mañana (05.00 GMT) de este lunes en marcha en dirección al norte de la franja de Gaza. Durante la noche, Israel y Hamás anunciaron que sus esfuerzos diplomáticos habían superado algunos bloqueos persistentes. Un responsable de seguridad en Gaza declaró “más de 200.000 personas desplazadas habían regresado a la ciudad de Gaza en las primeras dos horas”.
Hombres, mujeres y niños de todas las edades caminaron, algunos con un saco de arpillera a la espalda, otros empujando un carro con cuatro enseres que habían podido salvar después de meses de desplazamiento. Los más ricos viajaron en coche, pero tuvieron que esperar unas horas más para que les permitieran circular hacia el norte, por la avenida Salaheddine (Saladino), paralela a la playa.
La marcha debía tener lugar el sábado, según el acuerdo de tregua entre Israel y Hamás. Pero un desencuentro sobre la liberación de un rehén civil israelí y el suministro a Israel de una lista que estipula el estatus de todos los rehenes, vivos y muertos, había estancado el proceso.
Por la noche, el primer ministro israelí, Beniamin Netanyahu, finalmente anunció la noticia: la rehén Arbel Yehud se reunirá con su familia el jueves, e Israel recibió la lista. Con ello se levantó el bloqueo israelí del corredor de Netzarim, que divide la Franja de Gaza en dos desde la frontera israelí hasta el mar. Según lo acorado esta semana habrá dos días de intercambio: uno el jueves y otro el sábado.
La oficina de prensa del gobierno de Gaza estima que se necesitan 135.000 tiendas de campaña y caravanas en la ciudad de Gaza y en la gobernación del norte del territorio, donde más del 90 por ciento de los edificios han sido destruidos.

Una imagen muestra la hilera humana de refugiados en el centro de la Franja
La marcha hacia el norte tiene lugar en plena polémica sobre las declaraciones de Donald Trump, que ha manifestado que Jordania y Egipto deberían levantar habitáculos para acoger a más de un millón de gazatíes con el argumento de que las condiciones de vida en la franja son deplorables. Tanto Jordania como Egipto ya han rechazado la propuesta. En el primer caso, el país ya acogió en anteriores momentos de la historia refugiados palestinos. En el caso de Egipto, el presidente El-Sisi teme que su instalación en el Sinaí desencadene un período de inestabilidad en la zona.
La propuesta de Trump ha despertado el temor a una limpieza étnica de Gaza, objetivo de los sectores más radicales del gobierno de Netanyahu, en particular de los partidos ultraortodoxos que comandan Itamar Ben Gvir y Bezalel Smotrich, que ya han mostrado su entusiasmo por la idea, en la medida en que abre la puerta a la reocupación de ese territorio por colonos.
En Europa la propuesta de vaciar la franja de sus pobladores ha sido rechazada por España (según declaraciones del ministro José Manuel Albares en Bruselas) y Alemania, según las declaraciones del Gobierno desde Berlín. Giorgia Meloni, sin embargo, ha pedido tomar las declaraciones de Trump como una propuesta constructiva a no rechazar y una manera de implicar a los países vecinos de Israel a encontrar una salida al conflicto.
Por otra parte, el máximo responsable de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA), Philippe Lazzarini, insistió este lunes en que las operaciones de su agencia seguirán pese a la inminente entrada de vigor de las leyes israelíes que limitan su actividad, y aseguró que en todo caso sus competencias tendrían que traspasarse a un futuro Estado palestino.
Israel se ha mostrado siempre reacia a mostrar los planes que tiene para el futuro de Gaza en el caso hipotético de que la guerra que mantiene con Hamas acabe algún día. Fuentes de la seguridad israelí tienen la convicción de que la organización palestina sigue contando con el apoyo de una parte significativa de los pobladores de la franja. Hamas ha aumentado también su apoyo entre la población de la Cisjordania ocupada, donde el ejército de Israel ha desplazado sus efectivos en zonas como Yenin, donde ha provocado ya más de veinte muertos entre los palestinos.

Una simulación de la Gaza futura publicada en la Revista de Arquitectura u
Sin embargo, en la oficina del primer ministro israelí han circulado documentos en los que se concibe la futura Gaza como un hub comercial en el que confluiría la energía de los países árabes vecinos y la tecnología israelí. En esos planes no se menciona para la nada el futuro de la población gazatí.