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El S&P 500 registró un 76,8% de volatilidad, mientras que bitcoin 72,9%.
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La volatilidad actual de BTC es menor a la registrada en otras crisis globales.
En un giro que pareciera desafiar la historia, la volatilidad del precio de bitcoin (BTC) registró niveles más bajos que la del índice S&P 500, uno de los indicadores más tradicionales de los mercados bursátiles que agrupa a las 500 empresas más grandes de Estados Unidos, de acuerdo con el analista de Bloomberg, Eric Balchunas.
En una publicación del 11 de abril X, Balchunas calificó esta circunstancia como «una locura» que se da en un contexto de incertidumbre global desatada por la guerra arancelaria impulsada por la administración de Donald Trump.
Tras varios días en los que la cotización de bitcoin osciló entre los 75.000 y los 80.000 dólares, al momento de este artículo volvió a posicionarse por encima de los 85.000 dólares, según TradingView.

El S&P 500 supera a bitcoin en volatilidad
El siguiente gráfico compartido por Eric Balchunas ilustra este fenómeno poco común: la volatilidad del S&P 500 (línea blanca), medida en un periodo de 10 días, llegó a 76,8%, superando el 72,9% registrado por bitcoin (línea naranja) en el mismo lapso.

Este dato es particularmente llamativo si se contempla que los niveles normales de volatilidad del S&P 500, conforme al propio Balchunas, suelen oscilar entre el 10% y el 15%. Este índice históricamente ha sido visto como un ‘refugio’ de estabilidad dentro de los activos considerados más volátiles.
El pico alcanzado en abril de 2025 por el S&P500 refleja un mercado tradicional sacudido por la incertidumbre que introdujo Trump y sus políticas de tarifas comerciales.
Por su parte, bitcoin, a pesar de su reputación de alta volatilidad, mantuvo un nivel relativamente más contenido durante este periodo. El gráfico de Balchunas expone que la volatilidad del S&P 500 comenzó a dispararse a mediados de febrero, mientras que la de bitcoin, aunque también elevada, se mantuvo más estable en comparación.
Este comportamiento sugiere que, en momentos de crisis macroeconómica global, bitcoin podría estar empezando a consolidarse como un activo menos impredecible de lo que históricamente se ha pensado, desafiando las percepciones tradicionales sobre el riesgo.
La volatilidad de bitcoin es menor que en otras crisis
Mientras los mercados tradicionales enfrentan turbulencias, el análisis de Julio Moreno, analista de la firma CryptoQuant, aporta una perspectiva histórica sobre la volatilidad del precio de BTC.
Según el gráfico presentado por Moreno, que mide el rango de precios intrasemanal de bitcoin como porcentaje de su precio promedio semanal, la volatilidad actual del criptoactivo, incluso con los anuncios de tarifas comerciales de Estados Unidos y la retaliación de China, es significativamente menor que en otros episodios financieros críticos del pasado.
Esta métrica te dice qué tan «salvajes» fueron las oscilaciones de precio de bitcoin dentro de una semana, expresadas como un porcentaje de su precio promedio, lo que permite entender la magnitud de la volatilidad en un periodo dado.

Moreno destaca que, durante la crisis del COVID-19 en 2020, bitcoin experimentó un rango intrasemanal de precios que alcanzó el 72%, marcando uno de los momentos más turbulentos para la moneda creada por Nakamoto.
Otros episodios notables fueron el colapso de Terra-Luna y FTX en 2022. En ese momento, el rango de precios intrasemanal llegó al 49% y 31%, respectivamente, según Moreno. Asimismo, durante la corrida bancaria de Silicon Valley Bank (SVB) en 2023, la volatilidad de bitcoin alcanzó un rango del 31%.
En contraste, el impacto de la guerra de tarifas entre Estados Unidos y China en abril de 2025 ha generado un rango intrasemanal de entre 8% y 21%, un nivel considerablemente más bajo.
Este análisis sugiere que, a pesar de las tensiones comerciales globales, bitcoin ha mostrado una estabilidad relativa en comparación con eventos pasados que afectaron profundamente su precio.
En conclusión, los análisis de Eric Balchunas y Julio Moreno revelan un panorama financiero donde bitcoin, históricamente percibido como un activo de alta volatilidad, ha mostrado una estabilidad relativa. Este contraste sugiere que, en un contexto de incertidumbre global, bitcoin podría estar consolidando su rol un activo de refugio de valor.