Estados Unidos conminó ayer a Israel a mantener el alto el fuego, tal y como se desprende de la sucesión de acontecimientos que a punto estuvieron de acabar con el frágil alto el fuego que rige en este territorio después del pacto negociado por Donald Trump con la ayuda de Qatar, Egipto y Turquía.
Las últimas informaciones, que dan por buena la versión difundida por Axios, medio estadounidense con buena información sobre Israel, son que Estados Unidos instó al Gobierno de Beniamin Netanyahu a reabrir el paso de Kerem Shalom, que comunica la franja con Israel, desde primera hora del lunes.

Solo una hora antes, un escueto comunicado de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) anunciaba que mantenían su compromiso con el alto el fuego suscrito. La comunicación llegaba pese a que poco antes, a instancias del propio ejército, el Gobierno en Tel Aviv anunciaba que iba a suspender la entrada de ayuda humanitaria, fueran medicinas, comida o combustible.
Washington fue informado del ataque y pidió a Israel que ejerciera una respuesta proporcional
En realidad, nadie había declarado una ruptura del alto el fuego, pero el día había empezado con un intenso cruce de hostilidades entre Israel y grupos armados palestinos de la franja. Las FDI realizaron durante el día varios ataques aéreos. Residentes y autoridades sanitarias locales señalaron que los bombardeos aéreos y el fuego de los tanques israelíes causaron al menos once muertos en distintos puntos del enclave palestino.
Según el mando israelí, la ofensiva fue una respuesta a un ataque llevado a cabo por la policía de Hamas en el sur de la franja. “Dispararon un misil antitanque y ráfagas de fuego contra tropas que operaban en Rafah”, señalaron. Hamas lo negó. Las fuerzas israelíes lanzaron ataques en la zona para “eliminar la amenaza” y destruir túneles y estructuras utilizadas para actividades militares. El ejército israelí lo calificó de “una violación flagrante del acuerdo de alto el fuego”.
“No hay plazo para el desarme”
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, afirmó el domingo que no existe un plazo para el desarme de Hamas, a pesar de ser uno de los puntos principales del acuerdo de alto el fuego firmado con Israel para el cese de los bombardeos en Gaza. No es un plazo fijo, pero es un plazo que tengo en mente, y si en algún momento no hacen lo que se supone que deben hacer, tendremos que hacerlo por ellos”, dijo Trump en una entrevista con la cadena Fox News. Esas manifestaciones alimentan la percepción de improvisación sobre el plan.
Un alto cargo militar israelí llegó a advertir al mediodía que podrían lanzarse nuevos ataques contra objetivos de Hamas. También el primer ministro israelí, Beniamin Netanyahu, que hoy recibe al vicepresidente de EE.UU., J.D. Vance, dijo haber ordenado una respuesta “contundente” a los tiroteos en la zona sur de Gaza.

El humo se eleva tras un ataque aéreo israelí en Jan Yunis, al sur de la Franja de Gaza, este domingo
En contraste, a esa misma hora, el brazo armado del movimiento islamista negaba haber roto la tregua y aseguraba que sigue comprometido con el acuerdo en toda la franja. Añadió que no tenía constancia de los enfrentamientos en Rafah y que no mantiene contacto con los grupos armados que operan allí desde marzo.
Según diversas informaciones, Israel informó a EE.UU. de los ataques que iba a realizar. Un alto funcionario de la Casa Blanca habría exigido en respuesta que los ataques fueran “contenidos y proporcionales”. EE.UU. habría indicado que el foco debía ser “aislar a Hamas y avanzar hacia una alternativa política en Gaza, no retomar la guerra”.
El brazo armado del movimiento islamista negaba haber roto la tregua y aseguraba que sigue comprometido con el acuerdo en toda la franja
Rafah es un punto estratégico clave del territorio palestino. Allí está la única frontera con Egipto y la principal entrada de ayuda humanitaria. Allí esperan centenares de camiones fletados por las organizaciones humanitarias y los países donantes. Pero el paso permanece cerrado desde el 2024. Netanyahu anunció el sábado que no se reabrirá hasta que los cadáveres de los rehenes israelíes sean devueltos.
Israel exige a Hamas los restos de los 28 cautivos que siguen desaparecidos. El grupo asegura haber devuelto todos los cautivos con vida –20 en total– y los cuerpos de otros 12, pero afirma que recuperar los que permanecen bajo los escombros requiere “esfuerzos y equipamiento especializado”, al que no tiene acceso