Las aerolíneas han ganado un importante asalto en la batalla que libran con el ministerio de Consumo a cuenta de la maleta de mano. La reforma del Reglamento de Derechos de los Pasajeros, aprobada ayer por el Consejo de la Unión Europea, avala que las compañías cobren por este equipaje, una decisión que ha sido recibida con satisfacción por las compañías aéreas y que las refuerza frente al Gobierno. En juego están 179 millones de euros que Consumo impuso a cinco aerolíneas (Ryanair, Vueling, Easyjet, Norgewian y Volotea) y un modelo de negocio millonario.

La patronal que agrupa a las compañías en España, ALA, considerara que la reforma del reglamento, que aún no ha sido aprobada de forma definitiva, aporta claridad normativa sobre el equipaje en cabina y reduce la litigiosidad en los tribunales.
Ésta establece que las aerolíneas podrán cobrar por transportar en cabina el conocido como trolley, al tiempo que fija las dimensiones mínimas del equipaje de mano gratuito en 40x30x15 centímetros, medidas que deberán ser aceptadas por todas las compañías sin coste adicional.
El nuevo reglamento aún no ha sido aprobado de forma definitiva
“La decisión resuelve las dudas sobre la práctica del cobro de equipaje en cabina, unifica el criterio a seguir por los tribunales y termina así con las distintas interpretaciones que vienen haciendo los órganos jurisdiccionales en España al respecto, con lo que se reducirá la litigiosidad”, destacó ALA.
Todo ello, en medio de una intensa pugna judicial entre las aerolíneas y Consumo, que vivirá pronto un capítulo de máxima relevancia. El juez ha de decidir si admite las medidas cautelares solicitadas por las compañías contra la multa que les impuso Consumo en noviembre pasado, y el veredicto está al caer.

Las compañías sancionadas por el ministerio de Pablo Bustinduy han pedido medidas cautelares a la Audiencia Nacional para suspender la sanción hasta que se dicte una sentencia firme, algo que aún tardará meses. De esta manera, mientras se resuelve la petición, pueden seguir cobrando por llevar la maleta en cabina y no abonar la sanción de 179 millones.
Las aerolíneas tienen máxima confianza en que el juez apruebe las cautelares y que los tribunales, en última instancia, les acaben dando la razón. Prueba de ello es que ninguna de las multadas haya realizado provisión alguna en sus cuentas para hacer frente a una multa.
Batalla legal entre Consumo y las aerolíneas
Ahora bien, esta reforma aprobada por el consejo de la UE debe ser ratificada aún por el Parlamento Europeo. Ahí es donde el ministro de Consumo, Pablo Bustinduy, ve margen de actuación. ”Seguiremos peleando en este nuevo escenario por los derechos de las personas consumidoras en toda Europa”, ha señalado a través de sus redes sociales. Consumo ha hecho de la lucha contra el cobro de la maleta de mano una de sus medidas estrella, lo que le ha enfrentado a la industria y muy especialmente al consejero delegado del grupo Ryanair, Michael O’Leary.
El acuerdo político, adoptado el jueves por mayoría cualificada en el Consejo de la UE, contó con el voto en contra de España, Alemania, Eslovenia y Portugal, e incluye novedades como delimitar el concepto de equipaje gratuito al “bulto personal” que puede colocarse bajo el asiento delantero o la reducción de las cantidades en el derecho a reclamar por el retraso de un vuelo. De salir adelante, desmontaría la estrategia del ministerio de Consumo contra el cobro de la maleta.