El presidente del Bundesbank, Joachim Nagel, ha aprovechado su visita a Madrid para avisar de las tensiones inflacionistas que los aranceles trasladarán a la economía estadounidense y para asegurar que el nuevo proteccionismo de Donald Trump colocó a comienzos de abril a los mercados mundiales “cerca del abismo”.
En un encuentro organizado por Nueva Economía Fórum, Nagel ha sido contundente con la estrategia comercial estadounidense. “Tenemos que dejar claro a los colegas americanos que, si quieren poner este tipo de aranceles, ellos tienen mucho más que perder”.
El mensaje llega en plena negociación entre Bruselas y Washington. Tras imponer un arancel general del 10% y asignar uno específico del 20% a las importaciones europeas, la Casa Blanca anunció una pausa de 90 días para el segundo de los gravámenes. Como parte de los movimientos de los últimos días, Bruselas ha planteado eventuales contramedidas por valor de 95.000 millones.

“Desde el principio hemos sido bastante claros y hemos dicho que no es una buena política económica”, ha afirmado Nagel sobre los aranceles de Trump. “El país que impone aranceles es mucho más vulnerable ante la inflación que los países que deben pagar los aranceles”.
Su previsión es que en la próximas semanas se producirá una “curva de aprendizaje” en la que la Administración Trump habrá de darse cuenta de “los perjudicial de la incertidumbre creada”.
El “día de la liberación” aproximó los mercados al abismo
Por lo pronto, la primera experiencia ha sido que los mercados estuvieron “cerca del abismo” tras el “día de la liberación” de Trump, el 2 de abril. “Se acercaron mucho a una situación de caos”.
Un último apunte sobre los aranceles: para el banco central alemán, es necesario un dólar fuerte como gran moneda de reserva. La cotización con respecto al euro también acusa en forma de volatilidad la incertidumbre generada por Trump, aspecto que preocupa al Bundesbank.
Merz ha dado “las señales correctas”
Nagel se mostró además favorable al equilibrio entre política fiscal y necesidad de inversión por el que apuesta ahora el nuevo Gobierno alemán con el objetivo de potenciar el crecimiento y garantizar la defensa. “El nuevo canciller ha dado las señales correctas para auspiciar el crecimiento” y “podemos albergar la esperanza de que Alemania mejore su situación en los próximos meses y años”, dijo en alusión a Friedrich Merz.
Se mostró además ahora más abierto a la unión bancaria a nivel europeo y partidario de una simplificación de las reglas del sector. También defendió el euro digital, no tanto para desmarcarse de los bancos tradicionales como de operadores estadounidenses como Visa, MasterCard o Apple Pay.
En el mismo acto estuvo presente José Luis Escrivá, el gobernador del Banco de España. Anunció que en breve anunciará “un proyecto de transformación” inspirado en la “valiente iniciativa” al respecto del propio Bundesbank. El objetivo es lograr una organización “más ágil, digital y preparada para el cambio”, dijo.