
El equipaje de mano encarece en alrededor de 56 euros el precio del billete en las aerolíneas ‘low cost’, según desvela una encuesta realizada por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) a una muestra representativa de la población española, compuesta por 1.044 personas de entre 25 y 79 años.
Así lo ha precisado este lunes la asociación en un comunicado en el que explicó que la encuesta, que recoge la experiencia de quienes habían realizado algún vuelo en los últimos dos años, refleja también la “desinformación general” sobre las tarifas aplicables al equipaje de mano en las webs de venta de las aerolíneas low cost y que la mayoría de los pasajeros las pagan en el mismo aeropuerto, después de haber abonado el billete, bien durante el check-in (36%) o en la misma puerta de embarque (20%).
La encuesta refleja la “desinformación general” sobre las tarifas del equipaje de mano
Asimismo, la OCU subraya que pagar por el equipaje de mano no garantiza llevarlo consigo, dado que una de cada cuatro veces se requiere al pasajero para que lo deje fuera y llevarlo en la bodega por falta de espacio en la cabina.
A su vez, el 92% de los pasajeros encuestados considera que el equipaje de mano debería estar incluido en el precio del billete y el 77% cree que las aerolíneas utilizan los suplementos sobre el equipaje de mano para “engañar a los consumidores y aumentar sus beneficios”.
OCU defiende que el equipaje de mano “no es un lujo, sino una necesidad” y que cada pasajero “debería poder llevar consigo una pequeña maleta sin tener que pagar por ello”.
En este sentido, urge al Parlamento Europeo para que “prohíba definitivamente” su cobro, tal y como ha propuesto la Comisión de Transportes, cuya decisión supuso, a su juicio, un “firme espaldarazo” a la posición del Ministerio de Consumo, que impuso en noviembre una multa de 179 millones de euros a cinco aerolíneas low cost por “abusos continuados” contra los consumidores, según la organización.
La OCU recomienda a todos los usuarios a los que estas compañías obliguen a pagar por viajar con su equipaje de mano, la reserva de asientos a menores o la negativa a aceptar el pago en efectivo, que reclamen a la compañía la “improcedencia” de estos pagos. A aquellos que ya lo han hecho, se les insta a guardar los documentos que reflejan estos “abusos” para poder reclamarlos judicialmente si es preciso.