

En la estrategia de que la mejor defensa es un buen ataque, Pedro Sánchez ya denunció el pasado miércoles en el Congreso “la corrupción de Ayuso” cuando Alberto Núñez Feijóo puso el foco en la “corrupción generalizada” que atribuyó al Gobierno, por las causas que afectan a la mujer y el hermano del presidente o el fiscal general del Estado. Es lo mismo que este viernes han hecho el Ejecutivo de coalición del PSOE y Sumar: salir en tromba contra la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, tras la imputación judicial de los dos altos cargos autonómicos que elaboraron los “protocolos de la vergüenza”, Carlos Mur y Javier Peromingo, por los fallecimientos producidos en las residencias de mayores durante la pandemia. El sector socialista del Gobierno, al tiempo, ha cuestionado con dureza la apertura del juicio oral contra el hermano del presidente, David Sánchez, y ha justificado el aforamiento del líder del PSOE de Extremadura, Miguel Ángel Gallardo.
“El protocolo de la vergüenza nunca jamás se tenía que haber producido”, ha advertido la vicepresidenta primera del Gobierno, María Jesús Montero. Según ha criticado, este documento de la Comunidad de Madrid que descartaba la hospitalización de ancianos durante la pandemia, y al que se atribuye el fallecimiento de 7.291 personas, “despreciaba la vida de determinadas personas por determinadas cuestiones, edad u otros condicionantes, que no justifican el que no fueran desplazadas a recibir una atención digna médica”.
“Espero que la justicia, finalmente, ponga las cosas en su sitio. Porque este tipo de situaciones no se pueden volver a repetir”, ha confiado Montero.
“Desde luego, la Comunidad de Madrid y la señora Ayuso tendrán que dar explicaciones”, ha advertido a su vez el ministro para la Transformación Digital y líder del PSOE de Madrid, Óscar López. “Hoy, por fin, tras muchos años de lucha, se abre un rayo de esperanza para las familias de las 7.291 víctimas que fallecieron en las residencias durante de Madrid durante el covid”, ha resaltado. “Hoy por fin la justicia, tras muchos años de lucha de todas esas familias, abre esa oportunidad para por fin poder investigar lo que fueron los protocolos de la vergüenza”, ha celebrado López.
La vicepresidenta segunda y líder de Sumar, Yolanda Díaz, también ha resaltado que “los protocolos de la vergüenza supusieron que 7.291 personas en Madrid fallecieran, y es una vergüenza”. “Ya es hora de que alguien rinda cuentas”, ha resaltado, por su parte, la ministra de Sanidad, y portavoz de Más Madrid, Mónica García. “Se abandonó a su suerte a 7.291 personas, se les negó asistencia médica y se ha despreciado y criminalizado durante años a quienes pedían justicia”, ha criticado García.