
La gira precongresual de Alberto Núñez Feijóo ha recalado este miércoles en Melilla, donde el presidente del PP ha aprovechado para dar una vuelta de tuerca a su discurso migratorio y ha endurecido los términos, en sintonía con algunos planteamientos de Vox: “Quien venga a delinquir y a no respetar nuestros valores se irá por la misma puerta por la que entró”.
El líder popular ha hecho estas manifestaciones junto al presidente de la ciudad autónoma de Melilla, Juan José Imbroda, que ha señalado que ya “no cabe nadie más” en el enclave norteafricano y ha rechazado que pueda convertirse en la puerta de entrada a la Unión Europea de migrantes sin papeles, por lo que ha reclamado la intervención de Frontex y la inclusión en el espacio Schengen, del que no forma parte por su situación geográfica y su régimen fronterizo con Marruecos.
En este sentido, Feijóo, que mañana jueves tiene previsto desplazarse a Canarias, otra de las plazas, junto con Ceuta, en las que la llegada de migrantes es constante, ha arremetido contra la política migratoria del Gobierno de Pedro Sánchez, al que ha acusado de actuar con “irresponsabilidad” y de “carecer de modelo” en una materia “clave” para el futuro de España.
Con este planteamiento de expulsión “inmediata” de los inmigrantes que delinquen, que aunque no es nuevo tiene una mayor trascendencia por el escenario en el que se ha producido, Feijóo trata de cerrar las posibles fugas de su electorado hacia Vox, que mantiene una posición abiertamente contraria a la inmigración, especialmente a la de fe musulmana.
Con todo, el presidente del PP ha enmarcado su postura en la que defienden sus homólogos europeos desde el PPE, que también ha extremado sus planteamientos tras la irrupción en el escenario de la ultraderecha, con la que se disputa el poder en varios países de la Unión, como se ha visto recientemente en Polonia. Se trata, según Feijóo, de crear un sistema “firme, ordenado y planificado”, en línea con los demás países de la UE.

“No hay política inmigratoria más inhumana que aquella que no existe. No hay trato más vejatorio que repartir menores como si fueran paquetería”, ha denunciado el líder popular, al tiempo que ha criticado el “efecto llamada” del Gobierno, al que atribuye una “gestión ideológica” del fenómeno mediante el traslado de menores no acompañados a la Penínusla.
Así pues, el jefe de la oposición ha concluido que el Ejecutivo español “es el más irresponsable de Europa en materia migratoria” y ha recalcado que “el futuro gobierno del PP tendrá un nuevo modelo migratorio firme, planificado y con sentido”, del que ha anunciado sus principios básicos: “Es urgente ordenar la entrada de ciudadanos a nuestro país y parar el flujo descontrolado”, ha afirmado rodeado de jóvenes militantes.