El grupo municipal de Junts per Barcelona reclamará al gobierno municipal que preside Jaume Collboni que exija al Gobierno de Pedro Sánchez una modificación de la Ley de Estabilidad Presupuestaria para permitir que los ayuntamientos puedan destinar a inversiones financieramente sostenibles el dinero resultante de sus superávits , que en la actualidad solo pueden emplear en amortización de la deuda. En el caso de Barcelona, este cambio permitiría al Ayuntamiento movilizar cerca de 100 millones de euros.
El concejal Arnau Vives hará esta propuesta el miércoles, en la comisión de Economía y Hacienda. La modificación legal dejaría vía libre al Ayuntamiento de Barcelona para desbliquera los 96,4 millones de euros que acumula en los dos últimos ejercicios presupuestarios y revertirlo en “inversiones útiles para la ciudadanía.
La iniciativa también reclama eliminar cargas administrativas innecesarias y dar más flexibilidad a los ayuntamientos para atender emergencias sociales y crisis económicas.
El Ayuntamiento de Barcelona ha cerrado los dos últimos ejercicios presupuestarios con un superávit acumulado de 96,4 millones de euros y dispone de un remanente de tesorería superior al marcado por los propios objetivos financieros de la corporación municipal. A pesar de esta buena salud financiera, la Ley Orgánica 2/2012, de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera, restringe el uso de estos superávits y remanentes a la amortización de la deuda, impidiendo a los ayuntamientos utilizar sus propios recursos para inversiones necesarias y financieramente sostenibles.

“Es absurdo que el Ayuntamiento de Barcelona tenga casi 100 millones de euros acumulados y no les pueda destinar a inversiones urgentes para la ciudad, como la construcción de vivienda pública, la mejora de equipamientos municipales o la modernización de infraestructuras. Este dinero es de los barceloneses y tienen que revertir en proyectos que mejoren su calidad de vida, no quedarse inmovilizados para una ley restrictiva y obsoleta”, ha denunciado Arnau Vives.
La proposición de Junts para Barcelona sigue pasos de otra iniciativa con la firma de la formación independentista en el Senado, en la que se pide al Gobierno español que los ayuntamientos puedan destinar sus superávits a inversiones reales y sostenibles, en vez de restringirlos exclusivamente a la amortización de deuda; que se exima de la obligación de presentar un Plan Económico y Financiero (PEF) a los municipios que no presenten déficit estructural; que se acepten los informes de la Intervención Municipal como documento suficiente para autorizar usos puntuales del remanente y del superávit; y que se revise la regla de gasto para adaptarla a las necesidades reales de los ayuntamientos.
Una limitación que es hija de la crisis financiera
Arnau Vives ha señalado que la actual regla de gasto no permite flexibilidad para atender emergencias sociales o situaciones extraordinarias que requieran una respuesta rápida y efectiva. “Eso es un error. Los ayuntamientos tienen que poder actuar con agilidad ante crisis imprevistas, sin que eso suponga incumplir la normativa de estabilidad presupuestaria,” ha defendido al concejal de Junts.
Junts plantea esta propuesta no solo como una reivindicación de Barcelona, sino de “todo el mundo local catalán”. “Los ayuntamientos catalanes necesitan más autonomía financiera y más capacidad para invertir en aquello que realmente necesitan sus vecinos. Desde Barcelona tenemos que liderar esta reivindicación y hacer presión al gobierno del Estado para que cambie una ley que encorseta la autonomía municipal e impide que los recursos públicos revierten en la ciudadanía”, defiende el concejal de Junts per Barcelona.
Junts recuerda que la Ley de Estabilidad Presupuestaria se aprobó el año 2012, en pleno contexto de crisis económica, “para evitar que los ayuntamientos se endeudaran de forma irresponsable”. “Pero ahora -argumenta-estamos en una situación completamente diferente. Barcelona tiene las finanzas saneadas, cumple todos los indicadores financieros y tiene superávit. ¿Por qué no podemos utilizar nuestro propio dinero para hacer inversiones necesarias para la ciudad? Es una ley que está desfasada y que se tiene que modificar urgentemente”.