La hermandad de Santiago Apóstol anuncia que instalará una gran cruz a la entrada de La Solana. Será en el acceso desde la carretera de Valdepeñas, en la glorieta del teatro y los institutos, donde se ubicará el gran símbolo santiaguista, una cruz con más de 6 metros de altura, hecha en acero corten. Así lo confirmó a Radio Horizonte el presidente de la cofradía, Valeriano Jaime, nada más acabar el XII Caminillo de Santiago, que este año regresó a la normalidad de antaño.
Alrededor de 90 personas, gran parte de ellos colegiales, participaron en esta peculiar cita, que este año visitó las ermitas de San Antón y San Sebastián antes de finalizar con el abrazo al Apóstol en la parroquia de Santa Catalina. Los colegios Romero Peña, San Luis Gonzaga y El Humilladero se unieron a una cita que pretende emular la tradición de peregrinar para encontrarse con el patrón de España, que también es el patrón de La Solana.
Esta vez, el caminillo partió desde la Cooperativa Santa Catalina, con rumbo a la ermita de San Antón, la más antigua de La Solana. Allí hubo tiempo para un avituallamiento antes de retomar la caminata hacia la ermita de San Sebastián, declarada Monumento Histórico. El Cronista Oficial de la Villa, Paulino Sánchez, ofreció sendas visitas guiadas en ambos templos.
Dos niñas abrazan al Apóstol en Santa Catalina
La última parada fue la parroquia de Santa Catalina, donde la imagen de Santiago había sido bajada de su hornacina del retablo al frontal del altar mayor para que los caminantes dieran el abrazo tradicional al patrón. Todos los asistentes, ataviados con gorras donadas por la hermandad, llevaban su bastón de peregrino y recibieron su correspondiente credencial.
Valeriano Jaime admitió su satisfacción por recuperar el caminillo, que ya ha alcanzado su decimosegunda edición, y recordó que ya piensan en los actos centrales de la próxima feria, donde la cofradía organiza los actos en torno a la festividad del 25 de julio. “A partir de hoy nos ponemos manos a la obra y este año esperamos recuperar la procesión, que el año pasado no pudimos celebrar por el tema de la pandemia”, declaraba el presidente.
Entre tanto, ya trabajan en la gran cruz santiaguista que se instalará en una de las entradas del municipio. “Llevamos ya un tiempo con esta idea”. “Precisamente hoy nos han dado las medidas desde la oficina municipal de obras y ya se las he pasado al herrero”. La cruz la va a construir La Fragua de Pérez, un conocido taller metalúrgico de la localidad que va a colaborar con la hermandad en este menester. El Ayuntamiento se encargará de construir la peana donde se ubicará la cruz, con un aspecto tridimensional, una altura de unos 6 metros y con iluminación nocturna. El objetivo es que sea inaugurada antes del 25 de julio.