
El miércoles la Comisión Europea propuso adelantar la implementación de dos elementos clave del Pacto de Migración y Asilo. Uno ha sido la publicación por la Unión Europea de una lista de países de origen “seguro” las solicitudes de las cuales seguirán un procedimiento acelerado para el retorno de migrantes. La petición de asilo de los migrantes provenientes de estos países serán tramitadas en un procedimiento acelerado, con una posible orden de retorno. Entre los países de la lista se encuentran Kosovo, Bangladesh, Colombia, Egipto, India, Marruecos y Túnez. La lista es susceptible a actualizaciones y revisiones.
El Pacto de Migración y Asilo entrará en vigor en junio de 2026. La propuesta busca favorecer y acelerar el proceso de demandas de asilo de los Estados miembros de la Unión Europea para procesar más rápidamente aquellas solicitudes que probablemente sean desestimadas. De esta manera, pretende aliviar la carga de los países de la UE donde llegan más migrantes y reducir los desplazamientos entre países. A su vez, el Pacto establece las bases para un trato uniforme de las demandas de asilo en toda Europa.
La aplicación permitiría a los estados miembros de la UE acelerar el proceso de desestimación de las solicitudes de asilo
En segundo lugar, la Comisión Europea plantea que los Estados miembros de la UE puedan actuar también por la vía rápida y sin tantas garantías a los migrantes procedentes de países que, de manera habitual, solo el 20% de su población obtiene la condición de protección internacional. Además, a partir de ahora, los Estados miembros podrían añadir países de origen “seguros” con excepciones a la lista propuesta por la Comisión. De esta manera, gozarían de más potestad y flexibilidad a la hora de rechazar peticiones de migrantes de regiones específicas.
Para que la lista pueda ser adoptada formalmente deberá negociarse y ratificarse en el Parlamento Europeo y en el Consejo de la Unión Europea. Además, la Comisión Europea ha remarcado que la designación de país de origen “seguro” no garantiza la seguridad de su población. Cada país deberá valorar individualmente las demandas de asilo, independientemente de si provienen, o no, de uno de los países de la lista.
La aplicación de estas dos condiciones supone un mayor endurecimiento de las políticas migratorias europeas. Esto coincide con una reducción del 31% en la llegada de migración irregular a la Unión Europea en el primer trimestre del 2025. Según los datos recopilados por la Agencia Europea de la Guardia de Fronteras y Costas (Frontex), se han registrado casi 33.600 cruces fronterizos menos en comparación con el año pasado. Esta disminución del flujo migratorio se ha detectado en todas las rutas migratorias principales hacia los países europeos.