El ministerio de Trabajo que dirige Yolanda Díaz ha elaborado su propuesta de condiciones sobre la opa del BBVA al Sabadell que se basa fundamentalmente en el “el mantenimiento íntegro del empleo, la conservación de todas las oficinas, la garantía de acceso al crédito para pymes y autónomos en condiciones equivalentes a las actuales, la protección de los clientes frente a un deterioro de los servicios financieros y la no elevación de los niveles de concentración bancaria”. Las condiciones propuestas por el ministerio serán las que se plantearán en el consejo de ministros durante la discusión que se llevará a cabo a lo largo del próximo mes sobre opa.
Trabajo defenederá que en caso de que los requisitos propuestos por su edpartamento no se cumplieran, el ministerio considera que “no debería permitirse” la ejecución de la operación. El departamento que dirige Yolanda Díaz es uno de los cinco ministerios que reclamaron al ministro Carlos Cuerpo que elevara la decisión sobre la opa del BBVA al cosejo de ministros.

Los cáculos que maneja Trabajo es que el proceso de fusión supondría la pérdida de hasta 4.000 empleo, lo que significa una reducción del 9,4% en la plantilla. Sobre el cierre de sucursales, el ministerio opina que “perjudicaría especialmente a zonas rurales y regiones con fuerte presencia del Sabadell como en Catalunya, en la Comunitat Valenciana, en Murcia, en Asturias y en Galicia”.
En cuanto a la protección al crédito a empresas y autónomos, las condiciones propuestas por Trabajo se fundamentan en que “el Sabadell es una entidad clave para la financiación de pequeñas y medianas empresas”. El riesgo que detecta el ministerio es que “la fusión reduciría aún más la competencia en el sector bancario, con efectos muy negativos sobre clientes particulares y empresas”.
Los efectos de una hipotética fusión serían “un empeoramiento de las condiciones del crédito y depósito, aumento de comisiones o peores servicios”. Trabajo basa sus recomendaciones en que “España ya presenta uno de los mayores niveles de concentración bancaria de Europa” puesto que “las cinco principales entidades ya representan el 69,48%” del total.