El recién elegido papa León XIV, el primer estadounidense en ocupar el cargo, mantiene una fuerte conexión con España: su madre, Mildred Martínez, es de ascendencia española y le dejó su segundo apellido (Martínez) y parte de su identidad cultural. Así, aunque nacido y criado en EE.UU., Prevost siempre se ha mostrado orgulloso de su origen hispano por vía materna.
Su origen y su larga labor pastoral en Perú, donde llegó como misionero agustino en 1985, le ha dado también un gran dominio del español.
Robert Prevost ha visitado España en múltiples ocasiones, especialmente durante sus años como Prior General de la Orden de San Agustín (2001-2013). En 2002, la Asociación de Antiguos Alumnos de los Agustinos de la ciudad de León le nombró Asociado de Honor con motivo del centenario del actual colegio, que en 1902 se trasladó de la Gran Vía de San Marcos a un terreno en Trobajo del Camino. Prevost, comol Prior General de la Orden de San Agustín, acudió a la ciudad para presenciar los actos conmemorativos del colegio y ofició una misa por el centenario.

Imagen del patio de los Agustinos de León
En octubre de 2005 Prevost visitó Madrid para el Congreso sobre San Nicolás de Tolentino, con motivo del VII centenario de la muerte de este santo agustino y en el año 2006, en la misma ciudad, presidió la clausura de los Años Jubilares Agustinianos.
Como prior de los agustinos, Prevost ha estado estrechamente ligado a instituciones y comunidades eclesiales de la familia agustina en España, como la Federación Agustiniana Española (FAE) y con las órdenes religiosas afines como los Agustinos Recoletos.
Amigos españoles
En su larga etapa pastoral, algunos de sus colaboradores más próximos son religiosos españoles como el padre Alejandro Moral Antón, Vicario General de la orden en España bajo la dirección de Prevost y su sucesor como prior general. Otra persona muy cercana al nuevo Papa es Luis Marín de San Martín, un agustino español que actualmente es obispo auxiliar y alto funcionario en la Secretaría del Sínodo de los Obispos.
Tras su experiencia en Perú, Prevost ha mencionado varias veces la conexión histórica entre la Iglesia latinoamericana y la española, y huella que dejaron en ella los misioneros españoles y la cultura católica hispana, desde la devoción mariana hasta las tradiciones compartidas.
Actualmente, la orden de San Agustín tiene presencia en 50 países y está compuesta por la Primera Orden Agustiniana (sacerdotes y religiosos), la Segunda Orden Agustiniana (monjas de clausura) y la Tercera Orden Agustiniana.