Lola Solana (Madrid, 1964) dice que invertir en bolsa es la mejor manera de hacer justicia en la sociedad, nada más lejos que especular.
Presidenta del Instituto Español de Analistas, esta abogada lleva más de 35 años vinculada al Banco Santander, donde se ha especializado en fondos que invierten en small caps , que son las empresas que cotizan en bolsa a una valoración pequeña a causa de su tamaño.
“Invertir en pymes es la mejor manera de hacer justicia social, de fomentar el crecimiento de España y de su tejido empresarial. Incluso en tiempos de incertidumbre existen grandes oportunidades. Con las políticas proteccionistas de Donald Trump, veo opciones de compra interesantes para España”, apunta Solana, que hoy es la jefa europea de la inversión de small caps del Banco Santander.

Lola Solana
Licenciada en Derecho en la Universidad Autónoma de Madrid, la pasión por las finanzas le viene de unas prácticas que hizo mientras estudiaba. “Yo iba para juez, porque el sentido de la justicia lo tengo muy presente, pero un verano me apunté a unas prácticas en un banco que empezaba a vender fondos de inversión y el negocio me gustó tanto que decidí dedicarme a gestionarlos”, recuerda. Cuando acabó la carrera, encontró en las páginas amarillas de un diario una oferta en el Banco Santander. Recuerda que le faltaba inglés y contabilidad pero se formó y desde entonces, no ha parado.
Afincada en Madrid, Solana siempre se ha movido en un sector dominado por hombres. En ningún caso dice haberse sentido discriminada por ser mujer, aunque reconoce que ser madre no lo pone fácil. “Entre los 30 y los 40 inevitablemente la carrera se frena, pero después una se recupera”, sostiene la directiva, que es madre de tres hijos. Ella es un ejemplo en el sector. Desde el 2022, es la primera mujer que ocupa el cargo de presidenta del Instituto Español de Analistas. “En nuestro 60 aniversario, contamos con un total de 1.400 socios y el objetivo es llegar a los 2.000”, comenta.
Una de sus principales misiones es abrir el foco de la entidad. De hecho, Solana ha eliminado la palabra “financieros” del final del nombre del instituto. “Creo que la labor del analista va mucho más allá de las finanzas y por eso, queremos dar la bienvenida a los analistas de geopolítica, macroeconomía o asuntos ESG”. Asimismo, Solana quiere extender la presencia del instituto por toda España, con la apertura de delegaciones en Aragón o Islas Baleares, donde todavía no estaba. La formación también es uno de los ejes centrales de su mandato: “queremos ser un hub de talento, de divulgación de conocimiento económico de primer nivel, tanto para estudiantes como analistas”, señala.
El éxito de su carrera lo justifica a través de sus valores: la integridad, la sinceridad, el sacrificio y el apoyo de la familia y la religión. Procedente de familia de militares y empresarios de la construcción, Solana intenta trasladar su pasión y sus valores a sus hijos, que han seguido el mismo camino que ella. “El entusiasmo se acaba contagiando y los tres están trabajando en el sector”, señala.
Amante de su trabajo, Solana encuentra su paz en la oficina pero también en la astronomía, la lectura y la escriptura. Es una gran apasionada de la historia. “Siempre he pensado que me gustaría conocer a Isabel la Católica, fue la primera business angel de España al financiar la campaña de Cristobal Colón en América”. Aun así, su etapa favorita es la primera mitad del siglo XX. De hecho, Solana es autora del libro La cruz de madera ( Novela Histórica, 2019 ) , en el que cuenta la historia de su familia durante la guerra civil española. “Escribir es mi terapia y cuando murió mi madre quise rendirle este homenaje, otra forma de hacer justicia”, sostiene.