El puerto de Shanghai es el más grande del mundo. El 50% de las importaciones que recibe el de Barcelona, principalmente, productos electrónicos, maquinaria, textil y bienes de consumo provienen de esta ciudad china. Fruto de esta relación comercial, el president de la Generalitat, Salvador Illa, ha anunciado y rubricado un acuerdo con estas instalaciones portuarias para impulsar un corredor digital verde con emisiones neutras.
El segundo de estas características en Europa, ya que se está desarrollando uno de similares características entre los puertos de Singapur y Rotterdam. El president ha explicado que el acuerdo implica a empresas, navieras y zonas portuarias y que comporta que el traslado de los productos se efectúen con “emisiones neutras”.
“Se trata de una operación que se irá desarrollando de forma gradual”, ha señalado, al tiempo que ha informado que será la multinacional china Chery la que empezará a operar de esta forma. El 80% de los coches que fabrica esta compañía y que se distribuyen en España y Portugal tienen destino el puerto de Barcelona. La carga, desde el origen hasta su destino final, será con energías neutras.
“Chery tiene un importante volumen de mercancías y es un paso importante para mejorar la conectividad entre las dos ciudades”, ha señalado el president. De esta manera, se prevén desarrollar soluciones inteligentes en materia de digitalización y descarbonización, compartiendo experiencias.

El president de la Generalitat, Salvador Illa, en las oficinas del puerto de Shanghai
El presidente del Port de Barcelona, José Alberto Carbonell, y su homólogo en Shanghai, Song Xiadong, han firmado esta mañana el acuerdo en las instalaciones de Shanghai International Port Group. En este sentido, Carbonell ha informado que el acuerdo también prevé la colaboración en el sector de los cruceros, coincidiendo con el mercado chino. Illa ha mencionado el acuerdo firmado hace unos días entre el puerto barcelonés y el Ayuntamiento de Barcelona para reorganizar las actuales terminales que debe garantizar la viabilidad del sector y el “bienestar de los barceloneses”.
Illa también ha anunciado que a partir de septiembre China Eastern volverá a operar los vuelos que interrumpió durante la pandemia con Shanghai. Se trata de cuatro vuelos semanales y según Illa es “un paso más en la conectividad directa con Barcelona”.