
El pasado miércoles este diario publicaba la foto del rey Felipe VI y su primer ministro Pedro Sánchez en Nueva York. Naturalmente, hay infinidad de fotos de ambos, pero esta es muy simbólica: Sánchez habla, Felipe VI escucha con gesto rigurosamente serio. Merece un título de cine: “El hombre que susurra a Su Majestad”. El gobernante expone, el monarca escucha, quizá discute, pero asume. Constitución pura. Se vio después en el “detengan esa masacre”, bendición real a la política sobre o contra Israel. Y otro notable detalle: el Rey habló de masacre, porque hablar de genocidio sería ponerse de un lado del debate. Cumplió su papel de moderador.
Fin de la parte positiva de la crónica. El resto deja un sabor amargo, que la fachosfera explota para su canción de fin de ciclo y mucha opinión publicada se deja seducir por el sueño del barco que se hunde en medio del agotamiento, del cansancio, del hastío, de graves errores y del abandono de protectores. En el Congreso se aprueban leyes, Bolaños asegura que son bastantes, pero el Ejecutivo pierde las más emblemáticas, como la reducción de jornada o no logra su prioridad del año, que es seducir a Puigdemont porque le ha podido enviar a Waterloo a Zapatero con una valija con al menos dos tesoros: lo que falta de amnistía, las barreras a la inmigración.
El Estado español, pendiente del hombre que proclamó la efímera independencia de Catalunya en el 2017. Nunca tan decadente partido (encuesta la La Vanguardia ) tuvo tanto poder. Y al personal, naturalmente, le intriga adivinar si esto naufraga. “Depende”, respondemos los gallegos. “¿Depende de qué?”, preguntaréis los demás. Depende de las ganas del señor Sánchez. Lo razonable (incluso para él, porque puede barrer, según el CIS) es disolver porque se agotan los últimos cartuchos. Si algo faltaba, fue la “negligencia, incompetencia, indolencia, ocultación y mala fe” (calificaciones de Feijóo) en la turbia historia de las pulseras. Y lo malo no son los errores de fábrica. Lo malo es que se niegue todo, frente a las evidencias mostradas por sectores médicos, tecnológicos y judiciales. Y lo penoso es que un gobierno que va de feminista no se haya conmovido con los peligros que supuso para la mujer. Pretende que todo lo que sucede en un ministerio es un inmenso bulo (¡también en esto, señora ministra!) que debe quedar en la impunidad. Como quedó impune la barbaridad de la ley del solo sí es sí , que sacó de la cárcel a cientos de delincuentes sexuales.

Pedro Sánchez con el Rey
Pero esto no mueve un músculo de Sánchez, que en 16 meses pasó de la supuesta crisis de los cinco días a la seguridad de ser candidato en el 2027 para seguir gobernando después. No creo que diga eso solo para mantener la moral de los suyos. Creo que es una fortaleza derivada de otras seguridades. Sobre todo, de tres: los pocos votos que le quitan los errores, los buenos datos económicos y la tendencia ascendente de Vox. Ojo a esto: el Gobierno condena a Vox por racista o antidemócrata. Pero cuanto más sube en las encuestas, más le permite al PSOE agitar el voto del miedo y más deteriora las expectativas del PP.
RETALES
Destino. Que sigan jugando con drones y violaciones de espacios aéreos. Sigan, que lo próximo será un accidente. Después, un derribo. Más tarde, la respuesta, acción-reacción. Al final, orgullos patrios heridos, origen siempre de destrucción y muerte. No es ficción. Es lo que estamos viendo. Es lo que están haciendo.
Humo. Expresión del año: “cortina de humo”. La usa al PSOE para acusar al PP de tapar guarrerías. La usa el PP para acusar al PSOE de ocultar escándalos. Parece la fase siguiente al “y tú más”. Se plagian con descaro y sin pagar derechos de autor. Otra forma de corrupción.
Idioma. Se entendería que Francia negase la cooficialidad de los idiomas catalán, euskera y galego en Europa. Se entiende peor el no de Alemania, con 16 estados federados. Intento una leve explicación: Alemania tiene dialectos, pero solo un idioma oficial, el alemán.
Apoyo. Tribulación en la Moncloa por la encuesta de La Vanguardia : si Junts pierde tantos votos como se dice, ¿de qué sirvieron tantos viajes y acuerdos si Puigdemont no aportará suficientes escaños para sostener a Sánchez en el poder?
Semáforos. El domingo 21 todos los semáforos de la página 3 de este diario estaban en verde, cosa que solo ocurre un par de veces al año. Ese día solo había buenas personas, pero, ay, eran un neurólogo, un coreógrafo, una atleta y un actor. Políticos, ni uno. Y periodistas, menos.