Sí, incluso Mickey Mouse se rinde a la emergencia de la inteligencia artificial. Disney acaba de anunciar un acuerdo con OpenAI, el desarrollador de ChatGPT, por el que invertirá 1.000 millones de dólares en la startup de Sam Altman y permitirá que esta utilice sus icónicos personajes –de Mickey Mouse a Cenicienta, Ariel, la Elsa de Frozen o Lilo y Stitch– en su plataforma de inteligencia artificial para generar videos cortos. “Un acuerdo histórico”, ha proclamado la compañía fundada por Walt Disney. Sin duda, sobre todo porque el anuncio se produjo solo un día después de que Disney enviara a Google, el gran rival de OpenAI, una carta de cese y desistimiento en la que acusa al gigante tecnológico de “infringir a gran escala” sus derechos de autor en sus servicios de IA. La denuncia incluye docenas de imágenes y capturas de vídeos creados por los sistemas Gemini, Nano Banana y Veo a partir de personajes de Disney como Darth Vader, Homer Simpson o Spiderman. “No teníamos alternativa”, ha señalado el director general de Disney, Bob Iger, sobre la carta enviada a Google. “Ahora la pelota está en su tejado y veremos cómo reaccionan”.
Es el dilema al que se enfrentan las compañías de entretenimiento como Disney: denunciar a las empresas de inteligencia artificial o intentar cerrar acuerdos con ellas. En algunos casos, como CharacterAI, que también utilizaba imágenes de sus personajes, Disney ha conseguido ya que las retiren. Y antes que a Google, Disney denunció a otra compañía de IA, Midjourney, a principios de este año por los mismos motivos. En cualquier caso, la preocupación de Hollywood respecto a la IA es relativamente reciente. Llega a partir de la huelga de guionistas en el 2023 y la introducción de la plataforma Sora de OpenAI el año siguiente.
De Cenicienta a Lilo y Stitch
Disney invierte 1.000 millones en OpenAI y permite a ChatGPT utilizar sus personajes en su plataforma de video
En el lado del pacto, el ahora anunciado con OpenAI es el más importante hasta la fecha entre un gran estudio de Hollywood y un desarrollador de IA. Es un acuerdo a tres años, durante los cuales Disney permitirá a los usuarios generar videos con sus personajes utilizando Sora, la plataforma de videos cortos mediante IA de la startup. El pacto incluye a más de 200 personajes de Disney, Marvel, Star Wars y Pixar. OpenAI deberá compensar por ello al grupo Disney, aunque no está claro cómo, porque las dos compañías no han hecho públicos los detalles financieros del acuerdo. Y es importante: no se podrán utilizar imágenes o semblanzas de los actores, ni tampoco sus voces. De manera que, por ejemplo, un video generado con Sora podrá utilizar la imagen del Woody de Toy Story , pero sin la voz de Tom Hanks, el actor que interpreta al personaje en la versión original en inglés.
Límites
El acuerdo no incluye las imágenes de actores ni sus voces: se podrá jugar con la imagen del Woody de ‘Toy Story’, pero sin la voz de Tom Hanks
Es un acuerdo parecido al forjado entre Disney y Epic Games (creadora de Fortnite) el año pasado para crear nuevos juegos, por el que Disney compró una participación de 1.500 millones en Epic y permitió que sus personajes aparecieran tanto en Fortnite como en nuevos títulos.
Sam Altman y sus abogados llevaban tiempo negociando con los principales estudios de Hollywood, de Disney a Universal y Warner, ofreciéndoles el potencial creativo y comercial de la plataforma Sora. Hasta ahora todos ellos habían sido reacios a hacer negocios con una compañía de inteligencia artificial. Temían sobre todo enfurecer a los sindicatos y no poder controlar la utilización de su catálogo.
Ahora el acuerdo con Disney, resultado de dos años largos de conversaciones y numerosas reuniones al más alto nivel entre Iger y Altman, especifica límites a lo que los personajes podrán hacer en los videos de Sora en relación con las drogas, el alcohol y el sexo. En unas declaraciones a la cadena CNBC, Altman admitió el jueves que a Disney le preocupa cómo puedan utilizar los usuarios de la plataforma las imágenes de sus princesas, y que por ello será clave establecer unos límites muy claros. En su opinión, en todo caso, Disney es “un socio con mentalidad abierta” sobre la evolución futura de la tecnología.
A dos bandas
Pacto a tres años con OpenAI y amenazas a Google para que deje de utilizar los personajes Disney en sus sistemas
De hecho, a Disney también le interesa especialmente que sus personajes aparezcan en esos videos de 30 segundos de Sora para ayudarles a retener a la audiencia más joven, y contribuir así al crecimiento de Disney+, ha admitido Bob Iger. Como parte del acuerdo, Disney se convierte también en cliente de OpenAI, y podrá utilizar sus herramientas para crear nuevos productos y experiencias, lo que incluye el uso de ChatGPT por parte de sus empleados.
