
El último exabrupto de Javier Milei ha ido destinado a un niño autista. El presidente ultraderechista argentino apunta contra Ian Moche, un locuaz chico de 12 años que es influencer y en las redes sociales explica su día a día como autista, al mismo tiempo que defiende a las personas con discapacidad y exige más atención y recursos por parte del Estado, lo que choca con la motosierra de Milei, quien precisamente este fin de semana visitará Madrid.
“Ian, un niño de 12 años autista que habla de autismo”, se lee en la cabecera de su cuenta de Instagram, que tiene 449.000 seguidores y donde su madre, Marlene Spesso, aclara que ella es la administradora. El pequeño ya se ha convertido en una referencia divulgadora del autismo en Argentina y frecuentemente acude a conferencias y eventos sobre discapacidades.
La polémica con el mandatario ultraliberal tiene su origen en unas declaraciones de Ian y su madre la semana pasada en Gelatina, un popular canal de streaming, donde denunciaron los recortes gubernamentales a las ayudas a la discapacidad y explicaron una anécdota que desnuda la filosofía al respecto del Gobierno de La Libertad Avanza (LLA).
“Un hijo con discapacidad es problema de la familia, no del Estado”, habría dicho el director de la Agencia Nacional de Discapacidad
En marzo del año pasado, cuando Milei apenas llevaba tres meses en la Casa Rosada, Spesse y su hijo mantuvieron una reunión con el director de la Agencia Nacional de Discapacidad (Andis), Diego Spagnuolo, quien les dejó claro que el Gobierno no cree que el Estado deba hacerse cargo de un chico discapacitado.
“Si vos tuviste un hijo con discapacidad, es problema de la familia, no del Estado”, relató Spesse que afirmó Spagnuolo. “¡Que diga que los derechos adquiridos no son derechos adquiridos! O sea, a nosotros nos costó mucho poder lograr esos derechos y, en realidad, él nos hizo un cuestionamiento que fue literalmente: ‘¿Por qué yo tengo que pagar peaje y ustedes no’”, contó Ian parafraseando al alto funcionario.
Ya lo habían contado anteriormente en otros medios, pero Spagnuolo nunca había respondido y, de hecho, se prodiga muy poco en los medios a pesar de que los recortes sociales han sido polémicos desde la llegada al poder de Milei. Pero ahora decidió responder y el viernes acudió al programa de un periodista cercano al Gobierno, en el canal La Nación+, donde aseguró que todo era mentira. “No les dije eso de ninguna manera, no existe el contexto en que yo pudiera haber dicho una cosa así”, declaró Spagnuolo.
Horas más tarde, en la misma cadena, el chico y su madre fueron al programa de Paulino Rodrigues, donde cuestionaron a Spagnuolo por decir que mentían. “Tampoco es que nuestra intención fuera ofender a Spagnuolo (…) nada más contamos una anécdota”, indicó Ian, que dijo estar “muy nervioso”, antes de romper a llorar en directo.
Tras este programa, la polémica se amplificó y Milei salió en defensa de Spagnuolo retuiteando el mensaje de uno de sus partidarios, que afirmaba que el niño estaba siendo “utilizado” por su “familia ultrakirchnerista” y adjuntaba fotos de Ian con la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner y con el excandidato peronista Sergio Massa. El presidente escribió que Rodrigues “no falla nunca al momento de operar en contra del Gobierno”, tildándolo de kirchnerista. El líder argentino no mencionó que el niño y su madre también han mantenido reuniones con políticos derechistas.
La intervención de Milei abrió la veda para que los trols libertarios iniciaran en las redes una campaña de bullying contra el niño, publicando fotos de su escuela o de su casa. “Estamos viviendo un hostigamiento que parece irreal. Hoy Ian fue a la escuela, como siempre; la terapeuta nos pidió que tratemos de mantener la rutina, que evitemos mirar las redes sociales y la televisión. Es increíble que esto esté pasando. Hablamos con un abogado y vamos a pedir que el presidente dé de baja ese mensaje, no puede expresarse así ni exponer la imagen de un niño de esa forma. ¡Es un menor!”, declaró este martes la madre del chico al diario La Nación .
Los trols libertarios han iniciado una campaña de ‘bullying’ contra el menor, publicando fotos de su escuela o su casa
Desde las antípodas ideológicas del mandatario también han salido voces en defensa de Ian en las redes y en los medios que han aprovechado para cargar contra el anarcocapitalista por meterse con un niño autista. “Javier Milei no tiene límites para el odio”, tituló Página/12 . Por su parte, el popular periodista Víctor Hugo Morales, cercano al kirchnerismo, dijo que Milei “superó sus récords de estupidez e inmoralidad”.
Incluso la sección argentina de Amnistía Internacional (AI) se posicionó contra Milei, denunciando en sus redes sociales el acoso del mandatario a un menor. “Ninguna diferencia política justifica la exposición ni humillación pública de un niño. No hay excusa posible para este nivel de violencia simbólica desde el máximo cargo del Estado. Exigimos respeto por los derechos de la infancia y responsabilidad en el ejercicio del poder. El ataque desde el Estado contra niñas y niños no puede NUNCA ser la respuesta”, tuiteó la oenegé. ”El derecho de niñas y niños a vivir sin violencia no es optativo ni partidario y es responsabilidad del Estado garantizarlo. Irónicamente es pisoteado, nada más y nada menos, que desde la más alta autoridad del país”, añadía AI.
La Andis ya fue cuestionada en febrero pasado, tras publicar una resolución que especificaba los criterios médicos para evaluar la “invalidez” laboral, en que clasificaba a las personas discapacitadas en cinco grupos en función de su coeficiente intelectual: “idiota”, “imbécil”, “débil mental profundo”, “débil mental moderado” y “débil mental leve”. En un comunicado, la agencia dirigida por Spagnuolo indicó que había sido un “error”.
Casualmente, la polémica tiene lugar cuando está previsto que hoy se debata en el Congreso argentino la ley de Emergencia en Discapacidad, un proyecto que, ante los recortes con motosierra de Milei, pretende blindar los derechos sociales adquiridos de las personas con discapacidad en temas sanitarios, educativos o laborales hasta diciembre del 2027, mes en que el líder ultraliberal acaba su mandato.
Cuando sea mayor, Ian quiere ser periodista, un colectivo al que el presidente insulta casi a diario. Spagnolo y Milei acusaron al chico de mentir, sin caer en la cuenta de que un rasgo de las personas del espectro autista es su dificultad para decir mentiras, además de defender las causas justas.