
La líder de Aliança Catalana, Silvia Orriols, se ha adherido a Vox en las críticas a los obispos por su política migratoria, aunque no tenía vela en este entierro sobre el papel, puesto que la polémica entre la Iglesia y la formación de ultraderecha se originó a raíz de una moción que aprobaron en Jumilla el Partido Popular y el partido de Santiago Abascal para vetar la celebración de fiestas musulmanas en espacios municipales. Con todo, la dirigente había criticado en junio ya la Fiesta del Cordero, que es uno de los actos a los que se le quiere poner coto, y que “casi la mitad de los corderos matados en Catalunya” sean degollados según las tradiciones musulmanas.
Tras las críticas del arzobispo de Tarragona, Joan Planellas, a Vox como réplica a la andanada que profirió el líder de la formación ultra contra los obispos después de que se posicionaran en contra de la moción que instigó su partido, Orriols ha empleado términos parecidos a los de Abascal. Planellas, que además es presidente de la Conferencia Episcopal Tarraconense, que agrupa a las diez diócesis catalanas, señaló que ”un xenófobo no puede ser un verdadero cristiano” y remarcó que la formación ultranacionalista solo usa el catolicismo como “filón” político para cosechar votos.
“Que se pronuncien primero sobre los casos internos de pederastia, sobre la colaboración con regímenes dictatoriales, sobre el rechazo inadmisible a la comunidad homosexual y al acabar, que nos den las lecciones que quieran a los que confrontamos el avance del islamista”, señaló Orriols en sus redes sociales, como respuesta a las declaraciones de Planellas contra Vox.

Asimismo, la dirigente de la formación xenófoba catalana cuestionó si el arzobispo de Tarragona ya se ha pronunciado sobre las matanzas de cristianos a manos del islamismo en el continente africano o sobre la quema de iglesias y sinagogas europeas a manos de musulmanes. “A ver si para ser buen cristiano tendrás que ser pro islam…”, añadió la también alcaldesa de Ripoll, que en la cuestión migratoria coincide con los postulados de Vox.
De hecho, Orriols coincidió con Vox también en las críticas al anterior Pontífice, al papa Francisco. Cuando falleció, en abril, la líder de Aliança aseguró que su actitud le “alejaba” de la Iglesia. Además, el día de su muerte le dedicó reproches por “promover y aplaudir la islamización de Europa vía inmigración desenfrenada o envolver al niño Jesús con un pañuelo palestino después del ataque terrorista sufrido por el pueblo judío”. “No me parecen movimientos acertados por parte de quien comanda el cristianismo”, afirmó la dirigente como despedida al papa argentino, que también ha estado en la diana de Vox desde hace años, hasta el punto que Abascal se refería a él como “ciudadano Bergoglio”.
De hecho, hace unos años, el líder de Vox ensalzaba la figura de Robert Sarah, que es uno de los cardenales que hacía oposición interna a Francisco. Tras la muerte de este último, en cuentas relacionadas con Aliança Catalana, en el contexto del precónclave, también se compartieron fragmentos de intervenciones del cardenal guineano, que encarna el ala más conservadora de la Iglesia junto a otros purpurados como el estadounidense Raymond Burke o el alemán Gerhard Müller.