
“Muchas delegaciones internacionales nos dicen que quieren un DFactory en su país. Y siempre digo lo mismo. Desde el punto de vista arquitectónico es posible, pero reproducir lo que sucede en el Consorci de la Zona Franca es muy difícil”, señaló ayer Pere Navarro, el delegado especial del Estado en el Consorci de la Zona Franca de Barcelona.
En el marco del Barcelona Tribuna organizado por la Societat Econòmica Barcelonesa d’Amics del País, Navarro puso en valor el interés internacional que suscita el DFactory como distrito referente en la industria 4.0 de Europa. “Es un lugar irrepetible en el mundo: se reunen empresas punteras del mundo industrial, recibe el respaldo de un ecosistema tecnológico de la ciudad y está ubicado en una zona premium : está cerca del aeropuerto, del Port de Barcelona, de Mercabarna y también está muy bien conectado con el centro de la ciudad”, comentó ante el público de la conferencia, reunido en el Palau Macaya de Barcelona.
Aranceles
Hace un año mirábamos al Atlántico, tras la llegada de Trump ahora miramos a China
A lo largo de su intervención, Navarro destacó especialmente este centro neurálgico de la zona franca. El DFactory nació en el 2019 como incubadora industrial enfocada a la impresión 3D y hoy está en plena fase de expansión y diversificación. El CZFB ha puesto en marcha un plan de crecimiento que contempla triplicar la superficie –de 17.000 a 60.000m2– a finales de 2026 y llegar a los 100.000 en una tercera fase. “En el DFactory, vamos a dar la bienvenida a proyectos industriales de salud, agricultura y por supuesto potenciar otros sectores industriales que ahora están en auge como la IA, la nanotecnología, la robótica o la ciberseguridad”, comentó. Ahora, en este espacio trabajan unas 40 empresas y la idea es incrementar con creces esta cifra.
Durante la conferencia –que fue presentada por Miquel Roca Junyent, el presidente de Amics del País– Navarro también hizo referencia al resto del espacio del CZFB y en este sentido, puso en valor el legado de la industria de automoción, que sigue muy presente en la Zona Franca. El delegado alabó el proyecto de reindustrialización de la antigua fábrica de Nissan que están llevando a cabo los grupos Chery y Ebro y avanzó que Seat está preparando un proyecto innovador. En total, más de 300 empresas industriales trabajan en el CZFB, que suma una superficie total de 6.000m2. Además, Navarro recordó que recientemente el CZFB ha recibido una distinción de la OCDE que acredita que es la primera zona franca del mundo que presenta los estándares más altos de seguridad y transparencia en comercio internacional.
Con la coyuntura macroeconómica inestable, el CFZB tiene el foco puesto con la industria china. “Hace un año mirábamos de atraer oportunidades industriales de empresas del Atlántico pero con la llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos, hemos cambiado el foco y ahora miramos con mucho interés a China y el conjunto de Asia”, comentó a preguntas del periodista de La Vanguardia , Gabriel Trindade, quien fue el moderador de la conferencia.
Navarro no se mostró demasiado preocupado por la coyuntura global, al contrario: “El mundo está así y no lo podemos cambiar, no volverá a ser tan estable como antes, tenemos que asumirlo y adaptarnos rápidamente a este nuevo contexto”, apuntó.