
Prefabricados de Hormigón Sas ha cumplido 125 años en pleno proceso de diversificación. La histórica compañía, especializada en construcción industrializada de componentes de jardín, se asoció hace cinco años con la norteamericana Sonoma Cast Stone para lanzar Sonoma by Sas, una división de cubas de hormigón para el sector vitivinícola, ante la atonía de la construcción residencial en España y sobre todo en Francia, su principal mercado.
Joaquim Sas, presidente de la compañía y su hijo Adrià Sas, consejero delegado, explican que esta nueva división está cerca de alcanzar el punto de equilibrio. “Iniciamos este proyecto en el 2019 pero la pandemia lo frenó todo. Podríamos decir que hemos relanzado esta división hace cuatro años.
De momento representa el 3% de la facturación del grupo pero pensamos que puede crecer rápidamente”, comenta Joaquim Sas. La compañía catalana se asoció con la empresa norteamericana para ser los licenciatarios de su producto en Europa: “Hay dos razones fundamentales para este proyecto.
Con sede en Barcelona y fábrica en la Conca de Barberà, factura 13 millones de euros
La primera es que somos expertos en hormigón. La segunda, que entre España, Francia e Italia está cerca del 70% de la producción mundial de vino”. La decisión de entrar en un mercado tan diferente al residencial se debe a la atonía del sector en España y Francia. “En el año 2007, el mejor para nuestra empresa, en España se iniciaron 865.000 viviendas.
En el 2013, tocamos fondo con 35.000 viviendas y el año pasado justo se alcanzaron las 125.000. Esto ha sido un problema para todo el sector que nosotros compensamos con exportación en Francia”, explica Adrià Sas. La compañía pasó de exportar un 46% durante la crisis al 75% actualmente. Cuenta con filial propia en Francia y tiene acuerdos comerciales en Italia, Alemania, Bélgica, Portugal y Andorra.
La empresa también está estudiando su entrada en Marruecos. Sas tiene su sede social en Barcelona y cuenta con fábricas en Pira y Montblanc, en la Conca de Barberà. En total, da empleo a 85 trabajadores. “Es difícil encontrar empleados cualificados, sobre todo en oficios como mecánico, electromecánicos, operarios de robots o informáticos industriales.
La Conca de Barberà es una de las comarcas con menos paro de Catalunya y tenemos que atraer trabajadores de otros territorios”, dice Joaquim Sas.
La facturación del grupo el año pasado fue de 13 millones, prácticamente igual a un año antes, con un beneficio de medio millón. De cara al futuro, Sas se encuentra velando armas. “En España se necesitarían 300.000 viviendas por año. El mercado tendrá que reactivarse en algún momento y la vivienda industrializada jugará un papel importante”, señala el presidente del grupo.