
En el grupo parlamentario de Vox, cuya jerarquía y dependencia de Madrid nadie discute, insisten en que no hay una consigna de distanciarse del PP y poner contra las cuerdas a Carlos Mazón. La formación de derecha extrema ha optado por dar estabilidad al Ejecutivo valenciano tras la dana y, de momento, a juzgar por las encuestas, esta estrategia les está siendo beneficiosa. Sin embargo, en las últimas semanas algunos movimientos han evidenciado que los de Abascal están dispuestos a marcar un perfil propio y no van a renunciar a cargar contra el PP.
Ayer, Vox presentaba en las Corts Valencianes una PNL (Proposición No de Ley) “por el problema de los cribados del cáncer de mama” que tanta polémica ha generado en Andalucía y que ha puesto en una situación comprometida al presidente andaluz, Juanma Moreno Bonilla. Pero la inciativa presentada por la diputada Ana Vega, una de las parlamentarias del grupo que dispara igual contra el PP que contra el PSOE, va más allá y pide también datos sobre los cánceres de colón y de cérvix “porque lo que está sucediendo en toda España es muy grave y no sólo ha pasado en Andalucía, también ha habido fallos en Castilla La Mancha y aquí en la Comunidad Valenciana”.

Ana Vega apuntó al Botànic, el gobierno de izquierdas que estuvo en la Generalitat entre 2015 y 2023, pero no ahorró críticas al actual Consell de Mazón. “Estos problemas son debidos a la dejadez del PP y del Partido Socialista que han decidido priorizar otras cuestiones frente a la sanidad pública que es primordial. Estamos hablando de vidas humanas”. Y en esta línea, la derecha extrema reclama en esu PNL “una auditoría exhaustiva en la Conselleria de Sanidad y que se envíe a las Cortes Valencianas”. Se apunta así Vox a una estrategia política de intentar trasladar lo sucedido en Andalucía a la Comunidad Valenciana en la que PSPV y Compromís llevan tiempo trabajando. Y esto sorprende, porque los ultras no han secundado las estrategias de la oposición de izquierdas y se han mostrado muy comprensivos con la gestión de Mazón.
No ha sido el único cuestionamiento de las últimas semanas. El 13 de octubre, la formación de derecha extrema anunció la primera enmienda a la totalidad que hacen contra el PP. Una fórmula parlamentaria con la que pretenden tumbar el Proyecto de Ley presentado por la Conselleria de Hacienda para la creación de un nuevo Tribunal de Recursos Contractuales.
La tensión política entre PP y Vox a nivel nacional tambiñen unflueye pese a las cesiones deMazón a sus únicos socios parlamentarios
Y es que la relación entre ambas formaciones, muy condicionada por todos los movimientos en clave nacional, está generando tensiones pese a los intentos de Mazón de contentar a sus únicos aliados en las Corts en materias muy simbólicas para la derecha extrema.
De hecho, este fin de semana, tras la ruptura del pacto de gobierno en la localidad de Burriana (Castelló), la presidenta del Parlamento y líder provincial de Vox, Llanos Massó, acusaba al Partido Popular de seguir una “estrategia teledirigida desde Génova” para romper gobiernos con Vox en toda España: “Lo que ha pasado en Burriana es un ejemplo más de la deslealtad del PP. Algunos dirigentes populares sueñan con que Vox desaparezca, pero se equivocan. Seguiremos trabajando con más fuerza desde la oposición para defender los intereses de los vecinos de Burriana”.

Una situación de tensión en pactos locales que a medida que se acerque el final de la legislatura se prevé que vaya a más entre dos partidos que, en las urnas municipales, serán rivales directos.
