

El Gobierno no va a esperar a la ansiada tregua meteorológica que permita empezar a controlar las decenas de incendios desbocados que siguen devorando hectáreas de terreno forestal a una velocidad récord y el próximo martes declarará “zonas afectadas gravemente por emergencia de protección civil” las áreas golpeadas por los devastadores fuegos. Un mecanismo que implica la activación del programa de ayudas del Ejecutivo central y que permitirá movilizar recursos adicionales no incluidos en los planes autonómicos. Algo que diversos barones regionales del PP llevaban reclamado varios días al presidente del Gobierno.
Así lo anunció Pedro Sánchez en su visita de ayer al puesto de mando de Jarilla, en Extremadura, donde volvió a pedir la implicación de toda la sociedad y de las fuerzas políticas para impulsar un pacto de Estado contra la emergencia climática.
Los barones del PP agradecen los refuerzos mientras Feijóo acusa al presidente de “escatimar” medios
Acompañado por la presidenta extremeña, María Guardiola, el líder del Ejecutivo apeló a la “lealtad institucional” en un momento crítico y reclamó a las comunidades gobernadas por el PP un ejercicio de cooperación.
“Quiero que sepas, presidenta, que desde el primer momento el sistema de protección civil y el Gobierno de España han estado a disposición de la Junta de Extremadura para afrontar esta calamidad y esta tragedia. Y lo vamos a seguir haciendo hasta que el incendio se extinga y después, en la tarea de la reconstrucción”, remarcó.
Ese mensaje contrastó con la ofensiva de Alberto Núñez Feijóo, que desde la red social X acusó al Gobierno de “escatimar e improvisar siempre”. El líder del PP aseguró que los presidentes autonómicos y él mismo llevaban cinco días reclamando más efectivos de las fuerzas armadas sin respuesta adecuada, y reprochó además que el Ejecutivo llevara cinco años sin aprobar un Mecanismo Nacional de Respuesta de Protección Civil ni invertir en los fondos de prevención.
La dureza del discurso de Génova, no obstante, contrastó con la actitud mantenida sobre el terreno por los barones territoriales del PP más afectados por los incendios, quienes, aún tildándolos de insuficientes, reconocieron la llegada de más medios dejando entrever ciertas discrepancias entre la dirección nacional del partido y los territorios.
Alfonso Fernández Mañueco, presidente de Castilla y León, detalló el despliegue: un helicóptero de transporte, dos helicópteros pesados, dos bases logísticas, dos puestos de mando avanzados y cuatro grupos de soldados.
Tras él, Alfonso Rueda, presidente de la Xunta de Galicia, confirmó la llegada de 200 militares adicionales para apoyar a la Guardia Civil junto a los últimos recursos de emergencia recibidos, entre los que figuran tres buldóceres, una brigada de refuerzo forestal, dos aviones de coordinación y tres nodrizas.
Y lo mismo hizo Guardiola durante la comparecencia conjunta con Sánchez: “Es cierto que no todos los medios que pedimos han llegado, pero somos conscientes de que los recursos disponibles son los que están aquí”, admitió la presidenta extremeña confirmando la incorporación de efectivos procedentes de nueve comunidades autónomas diferentes a los que se sumaron 66 bomberos llegados de Alemania y un helicóptero enviado desde Eslovaquia.
Guardiola tuvo palabras de agradecimiento para todos los profesionales desplegados en la primera línea y destacó la cooperación entre administraciones en el Cecopi, subrayando que la magnitud del incendio “superaba la capacidad de cualquier autonomía”.
Una circunstancia que Sánchez no dejó pasar matizando en su intervención que las competencias en prevención y extinción de incendios “corresponden a las comunidades”, las cuales ayer completaron una jornada más sin solicitar que la alerta por emergencias se eleve del nivel 2 al 3, tal y como la población afectada reclama en las calles.