La no actualización del IRPF con la inflación ha llevado a una familia media, entendida como una unidad en el hogar compuesta por dos adultos y dos hijos con ingresos anuales de 50.000 euros, a pagar 736,39 euros más al año en impuestos, según un estudio de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea). Dicho de otra forma, la no deflactación de la tarifa ha provocado en esa misma familia un aumento de la presión fiscal de un 30% durante la última década.
Esta familia media escogida por Fedea abonaría, con unos ingresos brutos conjuntos de 50.000 euros en el 2024, una cuota total de IRPF de 3.170,75 euros. Si la tarifa de la renta se actualizase a la inflación acumulada desde el 2015 -tanto los umbrales que marcan el salto de tramo, como los mínimos personales y familiares-, que es del 26,7%, la cuota sería de 2.434,36 euros. De ahí salen los citados 736,39 euros pagados de más.
Fedea añade a esta conclusión que los efectos de no haber deflactado la tarifa del IRPF son “aún mayores en términos proporcionales para rentas más bajas”.

El estudio, firmado por Ángel de la Fuente, se titula “Seguimiento de las reformas del Plan de Recuperación y otras medidas estructurales” y en él se hace un seguimiento de las reformas estructurales implementadas en los últimos años, así como aquellas que se habían planificado pero no han podido aprobarse por la debilidad parlamentaria del Gobierno. En cartera queda, por ejemplo, el impuesto al diésel, que naufragó en el paquete fiscal de diciembre.
Sobre la no adaptación de la escala del IRPF a la inflación, que es una bandera del PP, Fedea señala que “ha supuesto un aumento importante de la carga del impuesto por una vía poco transparente para el contribuyente”. El organismo explica que cuando la inflación aumenta, como ha sucedido en los últimos años, los salarios suben y la renta monetaria de los contribuyentes crece, por lo que estos pasan a tramos superiores del IPRF y pagan tipos más altos, aunque su poder adquisitivo no haya variado.

Más allá del ámbito tributario, Fedea destaca la dificultad del Gobierno para sacar adelante algunas de las reformas previstas, entre ellas dos que “casi nadie discute”, la reforma de la ley del suelo y la creación de una Agencia de Salud Pública, por lo que insta a “recapacitar” a los dos grandes partidos