El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha difundido este domingo un vídeo creado con inteligencia artificial en el que se le muestra pilotando un avión llamado Rey Trump y lanzando excrementos a un grupo de manifestantes que protestaban contra su Gobierno. En la grabación, compartida a través de sus redes sociales oficiales, el mandatario aparece portando una corona de oro mientras sobrevuela a sus críticos.
El vídeo, que dura menos de un minuto, fue publicado tras una jornada de protestas frente a la Casa Blanca convocadas por organizaciones progresistas y universitarias. Las imágenes generadas por IA se han viralizado de inmediato y han provocado una fuerte polémica en los medios estadounidenses y en el Congreso.

Desde la oposición demócrata, varios legisladores han calificado el gesto como “una burla indecorosa” y “una peligrosa banalización del uso de la inteligencia artificial en política”. Por su parte, la portavoz de la Casa Blanca ha defendido el vídeo como “una sátira humorística” frente al “acoso mediático constante” al presidente.

El uso de contenidos generados por IA ha sido recurrente en la comunicación de Trump desde su regreso a la presidencia, con materiales elaborados por su equipo de campaña y diseñadores digitales afines. Expertos en ética tecnológica han advertido del riesgo de “normalizar” la creación de mensajes políticos falsificados o manipulados con herramientas de inteligencia artificial.
La publicación se produce en medio de una creciente tensión doméstica marcada por las críticas a las políticas migratorias del Gobierno y el endurecimiento de la seguridad en los campus universitarios. Mientras tanto, en redes sociales, el vídeo acumula millones de visualizaciones y ha generado un intenso debate sobre los límites de la sátira presidencial.