La policía de Tailandia ha detenido este sábado a uno de los supuestos directivos de la constructora que trabajaba en el edificio que colapsó en Bangkok el pasado 28 de marzo a raíz de un terremoto en la vecina Birmania.
El detenido es un ciudadano chino y las autoridades lo consideran sospechoso de vulnerar la ley de inversiones extranjeras, según ha indicado el departamento de Investigaciones Especiales de la Policía tailandesa en una rueda de prensa.
Otras tres órdenes
Los oficiales han indicado, además, que cuentan con otras tres órdenes de detención para sospechosos, estos de nacionalidad tailandesa.
Según las autoridades, los cuatro son sospechosos de actuar como testaferros de la constructora estatal china China Railway para esquivar las leyes tailandesas y poder operar en el país.
Los investigadores siguen la pista de otras empresas implicadas en el proyecto
Mientras tanto, las investigaciones continúan sobre otras empresas implicadas en el proyecto, incluida una siderúrgica china asentada en Tailandia que suministró el acero, que según las pesquisas sería de una calidad inferior a la necesaria, para la construcción.
A raíz del terremoto
El colapso de la futura sede de la Oficina Estatal de Auditoría, en el norte de Bangkok, sucedió a raíz del terremoto de magnitud 7,7 registrado el 28 de marzo en Birmania.
A pesar de que el epicentro del sismo se ubicó a más de 1.000 kilómetros de distancia de la capital tailandesa, el movimiento telúrico sacudió los altos edificios de la metrópoli.
El derrumbe del edificio en obras de más de 30 plantas, el único registrado en Bangkok por el terremoto, atrapó a unos 100 obreros, de los cuales hasta la fecha se han recuperado los cadáveres de 47 personas, mientras que los restos mortales de un número similar todavía se encuentran entre los escombros más de tres semanas después del accidente.
En Birmania, el fuerte temblor dejó más de 3.700 muertos, según datos ofrecidos por la junta militar.
